La aparición del mistral (y también la tramontana) está asociada con la llegada de un flujo marítimo fresco de origen atlántico, raras veces de frio continental, que penetra en el mediterráneo por el paso de Lauragis y por el pasillo que forma el Ródano-Saona.
Se trata en definitiva de un flujo de aire frio que se intensifica al pasar por esas puertas. Este viento se denomina Tramontana en Languedoc y Mistral, en la zonas de Provenza y la Costa Azul, pero es el mismo viento que nos encontramos, a veces, con otros nombres por todo el Golfo de león hasta las Islas Baleares, el mar de Liguria, Córcega y el norte de Cerdeña. Alcanza su máxima fuerza en la desembocadura del pasillo del Ródano-Saona, aunque puede ser má tempestuoso a nivel local (por ejemplo en el Cabo Corse o en la bocas del estrecho de Bonifacio).
La aparición del mistral está condicionada a las siguientes circunstancias:
- El establecimiento de una dorsal anticiclónica sobre el SW de Francia.
- Una depresión sobre el Mediterráneo occidental. Al soplar el mistral sobre la parte occidental de esta depresión, es la situación de ésta el factor que determina su campo de acción.
- Presencia de aire cálido estacionario en la zona de la depresión (aire mediterráneo). Si se produce una subida de aire cálido de origen africano en la parte oriental de la depresión, el tiempo es muy malo, pero el mistral queda frenado.
- Entrada de aire frio.
No es absolutamente necesario que se cumplan estas cuatro condiciones; la "tercera", concretamente, es "facultativa".
En resumen, al ser el mistral una invasión de aire frio, éste se desencadena siempre junto con la llegada de un frente frio al Mediterráneo. Este viento va acompañado de una disminución de la presión relativa en el Golfo de Génova, que con frecuencia forma una depresión. Al girar el aire alrededor de esta depresión, cuando sopla el mistral, el viento es del noroeste desde el Golfo de León hasta Córcega; Suroeste, en la costa oeste de Córcega y variable, moderado o flojo en medio del Golfo de Génova y en la Costa Azul.
MISTRAL: RECORDS Y ESTADISTICAS
Los datos obtenidos a partir de observaciones realizadas durante los últimos 25 años, por la estación meteorológica de Marignane, indican que el mistral ha soplado 499 veces a más de 100 Kms/hora, y que las frecuencias más fuertes se producen en los meses de febrero y marzo.
El 18 de febrero de 1958 y el 11 de enero de 1964 se registraron puntas de viento de más de 90 nudos (unos 165 Kms/hora). Pero el récord lo ostenta el Observataorio de Porto-Vecchio, en el que en el año 1962 el anemómetro marcó una ráfaga de 213 Kms/hora.
Por último no hay que hacer caso de la famosa regla del 3, 6, 9, que pretende que el mistral persiste durante 3, 6 ó 9 días, pues no tiene ningún valor científico. Las observaciones meteorológicas realizadas desde hace más de 100 años no dejan ninguna duda respecto a éste asunto, es decir, que el mistral no obedece a ninguna regla.
EL MISTRAL LOCAL
Es un mistral limitado al Valle del Ródano, a la Camargue y al norte del Golfo de León, muy frecuente y moderado. Basta con que se dé una de las condiciones siguientes para que el mistral se manifieste:
- Aumento de la presión, incluso pequeño, desde el Golfo de Vizcaya hasta el centro de Francia.
- O también una depresión térmica en el Mediterráneo, caso frecuente con régimen no perturbado; un gran anticiclón cubre la zona occidental de Europa y comprobamos, simplemente, un ligero descenso de la presión en el Golfo de Génova y en el Mar Tirreno. En este caso, el mistral sopla por la tarde.
- En invierno, con régimen anticiclónico frio sobre Europa, el aire enfriado en la zona por radiación basta también muchas veces para que empiece a soplar un mistral de tipo local, caracterizado por rachas fuertes.
EL MISTRAL BLANCO
El mistral es "blanco" cuando no va acompañado de nubes y precipitaciones. Es lo que ocurre cuando erl aire frio es seco e inestable, de origen continental.
Es también lo que sucede cuando aparece el mistral detrás de una perturbación típica. Las condiciones, entonces, se cumplen todas; el gran aumento de la presión, que sigue al frente frío, produce un mistral violento y un cielo despejado. De ahí viene la fama que tiene el mistral de "limpiar" el cielo. Suele ser frecuente y espectacular, pero no sistemático.
EL MISTRAL NEGRO
Cuando el aire frio de origen polar marino es húmedo e inestable, el mistral es "negro", pues va acompañado de un cielo cubierto de nubes bajas, coon cumulonimbos que producen chubascos y tormentas. En invierno, puede llegar a nevar.
El mistral negro aparece cada vez que no hay un aumento grande de presión y cuando se observa el paso de múltiples frentes fríos secundarios. Entre cada uno de los frentes hay una ligera mejoría de tiempo, pero el viento no llega a debilitarse.
Hay que señalar que con frecuencia el mistral es blanco en Provenza y sobvre el mar, y negro en Córcega. Esta particularidad se debe al efecto föehn y puede persistir durante varios diás seguidos. Vista desde las costas de Córcega, la mar presenta un aspecto resplandeciente, en vivo contraste con el cielo.