Por Buenos Aires a la lluviosa y algo cálida primera década de abril le sigue una segunda década más bien estable y fresca, sin nada reseñable más allá de las dos entradas frías (una potente pero que dejó temperaturas más suaves de lo esperado, y otra bastante más débil pero que debido a la calma reinante dejó temperaturas bajas durante la mañana). El otoño avanza.
Aunque no figura en el registro, hoy sí tuvimos algunas gotas aisladas en varios barrios hacia el atardecer, aunque nada de importancia.
Parece que la tendencia es a continuar con este tiempo anodino (mañana tendríamos el pasaje de otro frente frío débil, nuevamente sin más que algunas gotas)