Supongo que cuando váis a la montaña palentina lo haréis andando.
Muchas veces estoy de acuerdo contigo Papa, pero en esta ocasión no puedo estar más en contra de lo que dices. Demagogia pura y dura.
Para empezar no es comparable un teleférico como el de Fuente Dé, por ejemplo, con una gran estación de esquí con 80 km de pistas balizadas, pilonas, edificios esenciales, toma de aguas en arroyos y lagunas para la producción de nieve artificial, asfaltado de carretera hasta la base de la estación, construcción de parkings, generación de residuos y aguas fecales...Y esa es la parte pequeña del asunto. El negocio como todo lo que se hace en este nuestro bendito país está asociado a un desarrollo urbanístico especulativo bestial en las poblaciones de alrededor: promociones inmensas de chalets, campos de golf, centros comerciales... Y todo esto en una de las comarcas, medioambientalmente hablando, más importantes de la Europa Comunitaria. Vergonzoso.
El hombre también existe, por supuesto y todo esto lo venden como desarrollo para unas gentes tradicionalmente acostumbradas a estar abandonadas, gentes que han visto como se incumplían una vez tras otra los planes y promesas hechos desde la Administración para la zona. Y ahora que les interesa a los hijosdeputa de los políticos, promotores, negociantes y chupasangres de turno porque ven el negocio a la legua y participan de él, se coge la bandera de la defensa de la población local y se ondea con fuerza a sabiendas del ancestral cansancio de la comarca. Asco de país. Intereses por todas partes. Lo peor es que esas gentes que viven allí no se verán en absoluto beneficiadas y lo único que verán es como se disparan los precios de los productos, viviendas y campos colindantes, de modo que sus hijos no tendrán forma de vivir en su lugar de origen. Las viviendas serán en su inmensa mayoría segundas residencias (o a lo peor compras especulativas) vacías el 95% del año y la población entre semana seguirá siendo un fantasma solo que esta vez habiendo perdido por completo su identidad. Esto no es el cuento de la lechera, esto ya ha pasado en pueblos como Sallent del Gallego en el Pirineo de Huesca, donde los precios de las viviendas superan ya a los que se dan en Zaragoza. Bueno, miento, se verán beneficiados momentaneamente los cuatro caciques locales de turno que reordenarán el plan de ordenación urbana local hacia sus interes y fincas. Y todo por cuatro perras que les pagan por metro cuadrado de finca, en relación al valor que luego sacan al mercado. Y cuando se acaben las cuatro cochinas perras...
Tampoco los comerciantes locales irán viento en popa puesto que el objetivo es la construcción de centros comerciales...(también ha pasado)
¿Eso es el futuro para una zona deprimida de la montaña cántabro-palentino-leonesa? Eso es una mierda. Eso es convertir un paraíso cultural y ambiental en algo parecido a Las Rozas. Ahora a la gente se la conquista con promesas. Ya veremos como en el futuro empiezan a añorar su anterior naturaleza y modo de vida. La identidad se pierde y eso duele. En Madrid ha pasado en cientos de sitios.
Otra cosa, el que se hagan determinadas obras (vease teleféricos y refugios de montaña inadecuados), no concede una patente de corso para hacer muchas más cosas peor todavía. Eso es muy típico de este país: a sabiendas de que lo que se va a a hacer está mal, se justifica amparándose en otra actuación anterior errónea (aunque mucho menos errónea, dónde va a parar...) y lanzando mierda al vecino. Y así, la rueda sigue girando y nadie toma nunca el toro por los cuernos. Así hasta que todo desaparezca...