Los datos expuestos tienen una importancia crucial en la distribución de numerosas plantas en la península ibérica,hasta tal punto, que zonas con actividad tormentosa muy elevada en el verano, pueden tener un clima mediterráneo totalmente enmascarado que permite la supervivencia de especies de óptimo medioeuropeo en este interglacial. Esto puede verse de forma acusada en diversos puntos del sistema ibérico, sistema central, pirineos y parte de Cataluña. Especies como el haya, abeto europeo, robles del grupo robur, tilo, fresno europeo...., resisten heróicas en algunos sistemas montañosos gracias a la actividad tormentosa. Otras consideradas mediterráneas como la sabina albar o la encina levantina, sobrevivientes de otros climas del terciario, sobreviven sobre todo en la mitad oriental, donde las tormentas tienen un peso pluviométrico importante y por tanto, la sequía estival está atenuada, independientemente del total de precipitaciones caídas durante todo el año.
Reitero las felicitaciones al autor, sus datos son un libro abierto.