Después de una serie de oscilaciones de corto término que comenzaron hacia unos 12.000 años antes de Cristo, se produjo una subida de las temperaturas hacia el 8.300 AC que condujo a una sostenida alta temperatura en la Europa del Norte, que antes estaba totalmente cubierta de hielo. Las máximas temperaturas estivales que se experimentaron en Europa en los últimos 10.000 años ocurrieron alrededor de 6000 años AC. Por su parte, este calor llegó a Norteamérica recién hacia el 4000 AC.
Este período es conocido como Optimo Climático Postglacial donde las temperaturas eran 1 grado Farenheit más altas que ahora. ¿Qué quieren decir los científicos cuando hablan de Optimo Climático? Simplemente que esas temperaturas son consideradas las mejores las OPTIMAS para el desarrollo y el mantenimiento de cualquier tipo de vida, sea animal o vegetal.
Sin embargo, una brusca inversión conocida como la oscilación Piora se hizo presente hacia el 3500 AC, marcada por un fuerte avance de los glaciares en Europa y grandes migraciones de pueblos agricultores. Desde el 3000 AC hasta el 1000 AC, el clima recuperó un poco de su anterior calor. Del año 1000 AC hasta el 500 AC los glaciares avanzaron otra vez.
Hacia el año 400 de nuestra era, se instaló en Europa un período de más calor y más elevados niveles de los mares, pero otra vez fue seguido por un regreso a climas más fríos y húmedos. Puede verse la manera, a veces brusca, que tiene el clima de la Tierra para variar sus temperaturas, pasando de frío a calor y luego nuevamente a frío. Y todos estos cambios se produjeron sin la más mínima intervención del hombre, ni se le puede achacar la culpa a sus actividades manufactureras ni agrícolas, mínimas y burdas.
Y otra vez más el tiempo cambió y un clima realmente cálido imperó en Europa (y el resto del mundo, por supuesto) que culminó en Groenlandia hacia los años 900 a 1100 y en Europa hacia el 1100 a 1300. Este período es conocido como el Pequeño óptimo Climático (también como óptimo Climático Medieval). Las temperaturas de este período se hicieron, por un corto período, tan altas como las del óptimo Climático Postglacial (6000 a 4000 AC).