Uller, ciencia es método científico, y eso jamás queda anticuado... a menos que la ciencia deje de serlo. La observación de los hechos nos genera preguntas, y las respuestas que demos podrán acercarnos un poco más a la verdad... siempre y cuando se avengan a hechos futuros que no la falsabilicen.i
Los modelos, cuando están bien hechos, sirven para ayudarnos a explicar más o menos algunos hechos observados pero siempre dependen de los datos que introduzcamos: al tipo al que pertenecen los modelos climáticos, que por la complejidad del sistema no poseen datos de múltiples forzamientos que no se conocen o no se quieren conocer, se los denomina GIGO (Garbage In, Garbage Out = Entra Basura, Sale Basura).
El método que propones es perfecto (si se consiguen los datos prístinos, originales, sin manipulación) ya que permite la comparación con los datos de GISS, por ejemplo, que han sido manoseados hasta más no poder. Es cierto que en este caso son datos de lugares puntuales, no globales, pero la realidad es que los datos globales son la acumulación de datos puntuales.
Y, en todo caso, la hipótesis CGA dice que el CO2, para ella el principalisimo factor de invernadero, es un gas bien mezclado y que sus efectos son globales. ¿Por qué, entonces, hay tanta diferencia con los registros puntuales, y que están separados por muchísimos kilómetros y en regiones climáticas diferentes? La única explicación es que los termómetros utilizados son cada vez menos y se los selecciona muy cuidadosamente y/o se los modifica (homogeiniza) cuando no están de acuerdo con la hipótesis.
Por eso tu idea es valiosa: confrontar la hipótesis con la mayor cantidad posible de registros originales. No convencerá a los creyentes incondicionales, pero eso en realidad no importa. Lo que importa es la verdad.