Pasan los años, la vida sigue y el conocimiento sobre nuestra provincia continúa aumentando. En ocasiones nos crecemos, creemos que ya está todo visto e inventado y por eso es clave mantener la humildad y leer a los que saben para ser cada día un poco mejores. Ayer conocimos el singular valle de Olatz, uno de los más escondidos de Gipuzkoa y peculiar por ser una cuenca cerrada. Trazamos una circular que nos permitiera recorrer los puntos claves de la comarca y volvimos encantados por una serie de detalles que, si les parece, desvelaremos en las próximas líneas. Qué bien lo pasamos.
Ubicación: Macizo de Arno, Vizcaya.
Cima: Erribaso (537m).
Desnivel acumulado: 448m.
Distancia: 8,98km.
Duración: 2h y 45min.
Acceso: Partimos desde Olatz, barrio perteneciente a Mutriku. Desde Donostia salimos dirección Bilbao por la autopista A-8 hasta tomar la salida de Itziar. Descendemos a Deba y seguimos hacia Mutriku. A la salida de esta localidad, dirección Ondarroa, hay que estar atentos a un cruce que, por la izquierda, nos llevará en cuatro kilómetros a Olatz.
View Larger MapHacemos una parada en la ermita de Kalbario, encima de Mutriku.
10:30. Aparcamos al lado de la ermita de San Isidro (198m) y tomamos la carretera que sigue de frente.
En el primer desvío, vamos por la izquierda. Después volveremos por la derecha.
Nos ha salido un día otoñal maravilloso y vamos disfrutando de la belleza del valle.
Cuando llegamos a esta revuelta, seguimos de frente por la hierba.
Y comenzamos a superar el desnivel que nos espera hasta el collado a través de un bosque de pinos.
Encrucijada de caminos, señalados por un poste. Giramos a la derecha (oeste) para ganar el cordal.
11:43. Erribaso (537m), en hora y cuarto desde Olatz.
La cima apenas contiene vistas y guarda un homenaje a una joven fallecida.
Pero vemos lo que queríamos ver. El valle de Olatz desde las alturas, la mejor opción para contemplar una localidad.
Y las cimas principales del macizo de Arno.
Descendemos por su otra vertiente.
Hay infinidad de opciones, pero el GPS nos va guiando entre las diferentes pistas.
Coronamos un pinar lleno de zarzas, pero no encontramos el buzón del Jaungoikomendi.
Así que descendemos tranquilamente disfrutando del paisaje hacia la costa vasca.
Tontorramendi, encima de Ondarroa.
Otoio, protegiendo Lekeitio.
Y el Iluntzar.
Bordeamos el Basarte, una cumbre bien protegida por el encinar y el lapiaz, y regresamos a Olatz.
13:15. Fin de la circular.
Gracias a la recomendación de un amigo de Eibar venimos al Urgain, un restaurante de Deba en el que nos dimos un curioso homenaje:
ver webEl local, desde fuera (fotos de Twitter).
Pedimos el Richter, un Riesling de 2009.
Almejas a la marinera.
Cigalitas a la plancha. Las mejores de mi vida. Teta de novicia.
Besugo. De Ondarroa.
Y dos postres caseros: creme brulé.
Y tarta de piña con frambuesa.
Y os dejo el mapa.
Y os dejo la imagen 3D de Google Earth.
Y os dejo el perfil.
Y en wikiloc os dejo el track:
ver trackLAS NOTAS (La escala es del 1 al 5):
DIFICULTAD: 2,5. La ruta no es ni larga ni dura, pero considero que sí lo bastante dificultosa por la profusión de caminos. Ojo.
BELLEZA DEL ITINERARIO: 3. Queda claro que la montaña y su entorno no son atractivos. Tan claro como que Olatz justifica la excursión.
IMPORTANCIA DE LA CUMBRE: 1.
Y ASÍ LO VIO MI PADRE: Mi partenaire me comenta que "parece mentira que no conociera uno de los valles más bucólicos de Gipuzkoa".
No sé si habrá valles más escondidos en Gipuzkoa. ¿Conoce alguno?
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