Avance Climático Nacional de junio de 2025

Temperatura

El mes de junio ha sido extremadamente cálido en su conjunto, con una temperatura media sobre la España peninsular de 23,7 °C; esto es +3,6 °C por encima de la temperatura media de este mes (periodo de referencia: 1991-2020). Ha sido el mes de junio más cálido desde el comienzo de la serie en 1961, superando en +0,9 °C la temperatura media del mes de junio de 2017, que hasta ahora era el más cálido de la serie.




Durante el mes de junio la temperatura ha tenido un carácter extremadamente cálido en prácticamente toda la península y Baleares, Ceuta y Melilla. Únicamente ha tenido un carácter muy cálido en algunas zonas del este peninsular, en la parte final española de las cuencas del Miño, del Duero y Tajo, y en algunas zonas alrededor de la cabecera del Ebro. En Canarias el carácter de la temperatura ha sido variable, oscilando entre normal y muy cálido.



Las anomalías térmicas se han situado alrededor de +2 °C en las costas de Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco, parte de las costas de Andalucía, Melilla y algunas áreas del este de Extremadura; en el resto de zonas costeras y la mitad este de la península han estado alrededor de +3 °C respecto a sus valores medios para junio. En Aragón, gran parte de Cataluña y Castilla la Mancha, junto con amplias zonas de Madrid y Andalucía, han tomado valores en torno a +4 °C, incluso en alguna zona en Cataluña la anomalía ha estado alrededor de +5 °C. En Baleares, según las zonas, las anomalías han variado entre +2 °C y +4 °C, mientras que en Canarias han oscilado entre valores normales en zonas bajas y una anomalía de +1 °C en las partes altas de Tenerife y Gran Canaria.



Las temperaturas máximas diarias de junio estuvieron +4,2 °C por encima de su valor normal, mientras que las mínimas se situaron +2,9 °C por encima de su media; por lo que en este mes la oscilación térmica diaria media ha sido 1,3 °C superior a su valor normal en un mes de junio. En cincuenta y dos estaciones principales la temperatura media del mes resultó la más alta de cualquier mes de junio desde el comienzo de sus respectivas series. Además, en cincuenta y seis estaciones principales la media mensual de las máximas diarias también fue la más alta de la serie, y en treinta y seis la media de las temperaturas mínimas fue la más alta desde el comienzo de las observaciones. Durante prácticamente todo el mes de junio las temperaturas, tanto la media como la máxima y la mínima diaria han estado por encima de sus valores normales en esta época del año, solamente los días 3 y 4 de junio tuvieron un valor ligeramente por debajo de la media, cuando termina el episodio cálido iniciado en la última semana del mes anterior. Durante el resto del mes ha habido varios picos de calor, por ejemplo, los días 1 y 10, y los periodos comprendidos entre los días 17 y 21 y a partir del 28 de junio los valores de la temperatura media en España respecto a su valor normal superaron una anomalía de +5 °C. El último episodio cálido afectó incluso a Canarias.

En cuanto a las temperaturas de las estaciones principales, las temperaturas máximas más altas fueron las de Morón de la Frontera, donde el día 28 se registraron 43,5 °C, los 43,2 °C que se alcanzaron en Córdoba-Aeropuerto el día 29 y en Sevilla-Aeropuerto el día 30, y los 43,0 °C que se midieron en Badajoz-Aeropuerto el día 29. En 7 estaciones principales la temperatura máxima absoluta diaria fue la más alta de sus respectivas series. Las temperaturas más bajas entre los observatorios principales fueron los 5,7 °C medidos en el Puerto de Navacerrada el día 4, en Izaña se registraron 7,0 °C, en el aeropuerto de Lugo 7,2 °C el día 15 de junio y en el aeropuerto de Salamanca se midieron 7,9 °C el día 4 de junio. En once estaciones principales la temperatura mínima diaria de un mes de junio ha sido la más alta de sus respectivas series.

Precipitación

El mes de junio ha tenido carácter seco en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 21,7 mm, valor que representa el 68 % del valor normal del mes (periodo de referencia: 1991-2020). Se ha tratado del décimo tercer mes de junio más seco de la serie desde 1961, y el octavo del siglo XXI. En Baleares se ha tratado del mes de junio más seco desde 1961.



Durante el mes de junio de 2025, el carácter de la precipitación presentó notable variabilidad espacial en la península ibérica. Se localizaron áreas con carácter húmedo y muy húmedo principalmente en regiones del interior norte y en algunas zonas del centro peninsular, especialmente en el norte de Castilla y León, áreas dispersas de Aragón, y pequeños sectores de Castilla y León y La Rioja. En contraste, se detectaron extensas zonas con carácter normal, distribuidas principalmente en el centro de la Península, así como en áreas del oeste y sur. Las regiones con carácter seco se concentraron en partes del oeste de Castilla y León, de Extremadura, centro de Castilla-La Mancha, este de Aragón y sureste peninsular. De manera más destacada, aparecen áreas clasificadas con carácter muy seco en Galicia, Asturias, en zonas del noreste, concretamente Pirineos y parte oriental de Aragón, y en el norte de la Comunitat Valenciana y en Cataluña. Además, se identifican puntos de carácter extremadamente seco en el litoral cantábrico oriental y en el noreste peninsular. En el archipiélago balear predomina el carácter muy seco, mientras que en Canarias la precipitación tuvo comportamiento entre normal y seco, salvo en la isla de La Palma y norte de Fuerteventura donde el mes tuvo carácter húmedo.



Las mayores precipitaciones diarias registradas en los observatorios principales durante el mes de junio se concentraron mayoritariamente en la primera decena, con 45,0 mm en Valladolid/aeropuerto el día 3, 41.0 mm en Donostia/San Sebastián/Igeldo y 37,0 mm en Hondarribia/Malkarroa, ambos el día 13, 32,0 mm en Teruel y Foronda/Txokiza los días 15 y 24, respectivamente y 30,0 mm el Guadalajara el día 11. En cuanto a la precipitación total mensual entre las estaciones principales, sobresale Donostia/San Sebastián/Igeldo con 123,0 mm, seguido por Hondarribia/Malkarroa con 101,0 mm, Valladolid/aeropuerto con 74,1 mm, Logroño/aeropuerto con 60,6 mm, Soria con 59,2 mm y Foronda/Txokiza con 59,1 mm.



Finalmente, en las siguientes figuras se representan los mapas de precipitación acumulada decenal. Estas figuras permiten analizar con detalle la distribución espacial y la intensidad de las precipitaciones a lo largo de cada decena del mes e identificar las áreas con mayores acumulados. La escala de colores facilita la interpretación rápida de los episodios pluviométricos más significativos y su extensión geográfica.


















NOTA importante: Desde enero de 2023 se ha empezado a utilizar en la producción climatológica de AEMET los valores
Normales Climatológicos Estándares para el período 1991-2020, elaborados en el Área de Climatología y Aplicaciones
Operativas de AEMET, de conformidad con las directrices marcadas por la OMM en su Resolución 16 (Cg-17).

NOTA: Los datos empleados para elaborar este avance climatológico son provisionales y están sujetos a una posterior
validación.

©AEMET: Autorizado el uso de la información y su reproducción citando AEMET como autora de la misma.

Máxima de 14,7ºC.
Cielos con nubosidad de tipo alto, algo más abundante por la tarde.
Se marcan por ahora 11,8ºC,

Buenas noches a todos.

Máxima por aquí hoy de 13,2 ºC.

El cielo estuvo parcialmente cubierto de nubes altas, las cuales no llegaron a ocultar al Sol.

En estos momentos, 10,6 ºC.

Y viene más agua.
Ahora, desde casa

Lluvia de anoche:

14 grados y lluvia abundante de gota gorda

Estoy viendo este video de un periodista de El Confidencial sobre lo del 29oct24...

https://www.youtube.com/watch?v=yWuTvQjHyKE

A partir del minuto 6 entrevista a un vecino de Chiva que dice que a un amigo se le desbordo un pluvio de 800 litros... señalo la zona a la que se refiere, aunque como el vecino dice "a partir de la Serratilla" puede que estemos hablando de mas al oeste... no concuerda mucho con las cercanias, pero tambien estamos hablando ya de las estribaciones de la zona montañosa donde se situa la cuenca alta del Poyo, no del llano donde esta Chiva... ¿como lo veis?... yo, factible...

Parabéns Josejulio e muito obrigado por essa completa e competente explicação. Um prazer ler. 👏👏👏

Cita de: Josejulio en Ayer a las 11:33:13 AMTomo como ejemplo el tifón Uwan porque sirve muy bien para comparar eventos que ocurren por nuestras latitudes. En este caso la ausencia de cizalladura en la vertical aumenta la coherencia del núcleo del sistema angular ya que el ambiente barotrópico es cuasi perfecto: aguas cerca de los 30 grados, temperaturas en superficie cálidas (2 o 3 grados menos) y un extenso campo de valores cálidos compactos en todas las capas, hasta los 150 hPa, que están en armonía con el giro ciclónico sin inclinación del eje vertical.

Un bicho de mucho cuidado con olas de 14 metros vía costas del noreste. La energía proviene del calor latente en consonancia con una convección vertical alineada. La cizalladura vertical es enemiga del desarrollo convectivo. La minúscula ausencia de gradiente isobárico, de centros de acción dextrógira, permite el desarrollo de un sistema convectivo íntegro de giro levógiro sin apenas límites. Luz verde para Uwan salvo las cordilleras de Luzón, pero una vez que lo cruce es esperable un segundo desarrollo, aún por ver.

En nuestras latitudes la energía se produce de otra forma. Procede del desequilibrio térmico y la conversión de energía potencial baroclínica en cinética. Esto lo cambia todo. La cizalladura vertical es pura gasolina, ya que los sistemas convectivos se alimentan de la diferenciación térmica horizontal organizando la separación de corrientes ascendentes y descendentes en un flujo vertical oblicuo. Si no se mantienen separadas las corrientes el sistema colapsa. En los ciclones tropicales la separación de las corrientes ascendentes y descendentes también existe, claro está, pero fluyen de una manera circular, cerrada, en relación con las cercanías del ojo central y las afueras de su anillo convectivo.

Metaforicamente en los trópicos la energía se desarrolla en un ambiente de paz, aquí de guerra. Aquí es necesaria una invasión de fuerzas opuestas a las que hay. Cuanto más lento es su paso mayor es la descarga en superficie por el tiempo de acción, pero la ausencia de dinamismo del paso lento acaba por deshacer la cizalladura necesaria.

Pasado el tempo de paz tropical el ciclón muere como tal pero renace como ciclón extra tropical, transfiriendo su energía a los engranajes baroclínicos del campo Ferrel. La energía no se destruye, se transforma. Dependiendo de su distancia con respecto al chorro (suelen estar en fase de acercamiento) el núcleo comienza a inclinarse al recibir frío en altura a la vez que se encuentra con el flujo de la divergencia natural a gran altura asociada al chorro, fuerza que reactiva las fuerzas ascendentes, sólo que a partir de ese momento se realiza de manera no simétrica.

El pulso se adapta a esta nueva matrix debido a su potente momento angular. Esta inercia de giro conserva la rotación y el equilibrio centrífugo aunque cambien las fuentes energéticas y térmicas. La fuerza que sería cortada como cordón umbilical tropical sería la conexión termodinámica directa con el océano cálido intermediada por el flujo de calor latente desde superficie. En los trópicos el aire en superficie suele estar algo mas bajo que el calor latente del océano proporcionando un muy pequeño pero efectivo gradiente que favorece una inestabilidad continua como pegamento de toda la estructura vertical entre la brecha agua-aire. Cizalladura térmica suave, no violenta.

Cuando el pulso pase a campo Ferrel suele producirse un cambio de forma rápida, tanto en trayectoria como en transformación de fuerzas vitales. Estas transferencias de energía muchas veces no son demasiado visibles en unos mapas en los que parece que no hay intercambios, pero si miramos la orquesta completa podemos darnos cuenta de que detrás hay una sincronización de factores de tipo general. Como cuando la última baja de un tren de pulsos atlánticos se frena dejando pasar calor al norte y frío al sur trastocando el patrón lineal anterior.

La semana que entra iremos viendo estas transformaciones desde un Pacífico en la cresta de la ola MJO hasta Norteamérica-Atlántico y meridiano cero.

Esta transferencia de energía desde el sur a la cuerda del chorro pacífico se realizará en sincronía con las previas entradas sur al Polo, es decir, a la vez que la posterior ruptura de sus fronteras circumpolares. En nuestras macro regiones coincidirá con un chorro roto por la entrada cálida hacia Groenlandia y su fuerte bloqueo propiciador de un descuelgue de frío polar hacia el norte de Europa.

También coincidirá con el presunto desarrollo de un sub vórtice estratosférico con inversión total hacia la región alasqueña, todo ello dentro de un ambiente general de pérdida de fuerza de vientos polares. 

La posible insistencia y traslado del frío al occidente europeo dependerá de la estabilidad/inestabilidad de las alineaciones de las altas polares y groenlandesas. Estamos ante un altamente interesante noviembre.

Saludos!

Hola. No he entendido nada de lo que has escrito pero ole tú.

Saludos.

Avance Climático Nacional de la primavera de 2025

Temperatura

La primavera de 2025, es decir, el periodo comprendido entre el 1 de marzo y el 31 de mayo de 2025, ha tenido un carácter normal, con una temperatura media en la España peninsular de 12,7 °C, solamente 0,3 °C por encima de la media de esta estación (periodo de referencia 1991-2020). Ha sido la decimoctava primavera más cálida desde el comienzo de la serie en 1961, y la decimotercera más cálida del siglo XXI.



La temperatura de esta primavera ha tenido un carácter cálido en el tercio noroeste de la Península, en el sur, en el este de Castilla- La Mancha y en el Levante, incluso muy cálido en zonas costeras, y en áreas de Galicia y de Castilla y León. En el resto de la Península el carácter ha sido normal con áreas en las que ha sido incluso frío. En Baleares la primavera ha tenido un carácter muy cálido, mientras que en Canarias ha variado mucho dependiendo de la isla, siendo más frías las más occidentales.



Las anomalías térmicas estuvieron cercanas a +1 °C en Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, norte de Navarra y zonas del norte de Castilla y León; así como en Ceuta y Melilla, y en la costa de Murcia, de la Comunitat Valenciana y parte de la de Andalucía. En la mayor parte de la España peninsular las anomalías se situaron alrededor de 0 °C. En Baleares tomaron valores en torno a +1 °C, mientras que en Canarias estuvieron comprendidas entre -1 °C y 0 °C.



Las temperaturas máximas diarias quedaron en promedio por debajo de su valor normal, en concreto la anomalía fue de -0,2 °C, mientras que las mínimas se situaron 0,7 °C por encima de la media; con lo que la media de la oscilación térmica diaria resulta 0,9 °C por debajo de la normal de la primavera.

La primavera comenzó con un mes de marzo muy frío, con una diferencia de la temperatura media en la España peninsular de -0,9 °C respecto a la promediada en el periodo de referencia; las temperaturas se fueron normalizado a final de mes y en abril la temperatura media quedó 1,1 °C por encima del valor normal, lo que supone que abril tuvo un carácter muy cálido. Mayo fue normal, con una temperatura media 0,5 °C por encima de sus valores normales en esta época del año.

Marzo resultó frío o muy frío en la mayor parte de la España peninsular, excepto en zonas costeras como el Cantábrico oriental o la costa Blanca. En Baleares tuvo un carácter cálido o muy cálido, mientras que en Canarias resultó entre normal y muy frío. Las anomalías térmicas se situaron alrededor de -1 °C en la mayor parte del interior peninsular, llegando a alcanzar valores en torno a -2 °C en zonas de los sistemas Central e Ibérico y en puntos del Pirineo catalán. En las zonas costeras de la España peninsular las anomalías tomaron valores en torno a 0 °C, alcanzando valores cercanos a +1 °C en algunos puntos del Cantábrico oriental y del sureste. En Baleares las anomalías se situaron en torno a +1 °C, mientras que en Canarias tomaron valores en torno a 0 °C en zonas bajas y alrededor de -1 °C en las zonas de mayor altitud.

Abril fue muy cálido en la mitad noreste de la España peninsular, así como en las costas del sur. En el resto tuvo un carácter cálido salvo en algunas zonas de la cuenca del Guadiana. En Canarias tuvo un carácter variable de unas zonas a otras. Las anomalías térmicas se situaron alrededor de +2 °C en Cantabria, País Vasco, norte de Navarra, gran parte de Galicia, Asturias, oeste de La Rioja, noreste de Castilla y León, y algunas áreas de Baleares, Castilla-la Mancha y Aragón. En el resto de la España peninsular la anomalía térmica estuvo alrededor de +1 °C salvo en algunas áreas de Andalucía y Murcia, y en gran parte de Extremadura donde la temperatura tuvo valores normales, lo mismo que en la mayor parte de Canarias.

Mayo tuvo un carácter de temperatura normal en casi todo el centro de la España peninsular. Las temperaturas se pueden calificar como muy cálidas en casi toda la costa mediterránea y en zonas del extremo noroeste peninsular, pero se iban suavizando rápidamente hacia el interior. En Baleares las temperaturas fueron predominantemente cálidas y en Canarias tuvieron un carácter variable. Las anomalías térmicas se situaron alrededor de +1 °C en Baleares, Andalucía, Murcia, Comunitat Valenciana, Ceuta y Melilla, en la mayor parte de Galicia y de Castilla-la Mancha, y en amplias zonas de Cataluña, de Aragón y del País Vasco. En el resto de la Península y en Canarias los valores de la temperatura se pueden calificar de normales.
 
Episodios destacados

En la primavera hubo varios episodios cálidos, destacando por su duración el que comenzó el 30 de marzo y se extendió hasta el 14 de abril, siendo su intensidad máxima en torno al 9 de abril, cuando tanto la temperatura diurna como la nocturna estuvieron muy por encima de sus valores normales. También destaca por su duración, aunque la diferencia con las temperaturas habituales en esa época del año no fuera tanta, el que hubo entre los días 23 de abril y 3 de mayo. Estos episodios hicieron que el mes de abril tuviera en conjunto un carácter muy cálido. Por último, a partir del 25 de mayo se inició un episodio cálido muy intenso que duró más allá del fin de mes, en el que se alcanzaron las temperaturas máximas de la primavera. En marzo no hubo ningún episodio cálido significativo.
 
Las temperaturas más altas de la primavera en las estaciones principales se alcanzaron todas en mayo, destacando los 40,7 °C que se registraron en el aeropuerto de Córdoba y en el aeropuerto de Sevilla el día 31; los 39,5 °C de Morón de la Frontera también el 31 de mayo; y los 39,4 °C medidos en el aeropuerto de Jerez de la Frontera el 30 de mayo. En diez estaciones principales se registró la temperatura máxima diaria más alta en una primavera desde el comienzo de las observaciones. En las estaciones de Almería/aeropuerto, Palma-Portopí y Reus/aeropuerto se alcanzó el valor más alto en sus respectivas series de la temperatura media, y el de la media de las temperaturas mínimas de la primavera; esta última efeméride también fue superada por la estación de Murcia.

En cuanto a las bajas temperaturas, hubo varios episodios fríos. En el mes de marzo, en el que las temperaturas máximas diarias estuvieron por debajo de sus valores habituales, ocurrieron dos destacables por su intensidad y duración, entre los días 11 y 18 y entre el 21 y el 25. Entre el 14 y el 23 de abril hubo también dos episodios fríos cortos separados por una subida de temperaturas el día 18. En el mes de mayo hubo un episodio frío no tan intenso que se extendió entre los días 4 y 16. Entre las estaciones principales destacaron los -7,0 °C en el Puerto de Navacerrada y los -6,2 °C en Molina de Aragón, observados en ambos casos el 15 de marzo; también en marzo, el día 17 se midieron -5,7 °C en Soria y -4,8 °C en Burgos/Villafría.

Precipitación

La primavera ha sido en su conjunto muy húmeda en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 278,8 mm, valor que representa el 151 % del valor normal del trimestre en el periodo de referencia 1991- 2020. La primavera de 2025 ha sido la quinta más húmeda desde el comienzo de la serie en 1961 y la tercera del siglo XXI, detrás de las de 2018 y 2013. En Canarias ha sido la séptima más húmeda desde 1961 y la segunda del siglo XXI, detrás de la primavera de 2011.



Durante la primavera de 2025, el carácter de la precipitación fue predominantemente húmedo o muy húmedo en gran parte de la Península. Las zonas con carácter extremadamente húmedo se localizaron principalmente en áreas del oeste de Andalucía, suroeste de Castilla-La Mancha y puntos del oeste de Extremadura. También se observó comportamiento muy húmedo en amplias zonas del centro peninsular, sur de Galicia, Castilla y León, y la mitad norte de Aragón y Navarra. En contraste, algunas áreas del norte de Galicia, norte de Castilla y León, y puntos aislados del noreste peninsular y del Levante mostraron carácter normal o seco. En los archipiélagos, el carácter fue en general húmedo o normal, destacando algunas zonas puntuales muy húmedas en las islas más montañosas.



La primavera comenzó con un mes de marzo muy húmedo en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 148,8 mm, valor que representa el 251 % del valor normal del mes (periodo de referencia: 1991-2020). Se ha tratado del tercer mes de marzo más húmedo de la serie desde 1961, detrás de 2018 y 2013. Abril tuvo carácter húmedo, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 70,6 mm, valor que representa el 111 % del valor normal del mes (periodo de referencia: 1991-2020). Se ha tratado del vigésimo cuarto mes de abril más húmedo de la serie desde 1961, y el décimo del siglo XXI. En Canarias se trató del tercer abril más húmedo, detrás de 1977 y 1982. Finalmente, mayo ha tenido carácter normal en cuanto a precipitaciones, con un valor de precipitación media sobre la España peninsular de 51,4 mm, valor que representa el 90 % del valor normal del mes (periodo de referencia: 1991-2020). Se ha tratado del trigésimo primer mes de mayo más seco de la serie desde 1961, y el décimo cuarto del siglo XXI.



Marzo fue muy húmedo en casi toda la Península y Baleares, llegando a ser extremadamente húmedo en amplias zonas del interior peninsular, interior de Cataluña, de Valencia y Murcia, la mitad oeste de Andalucía, el sur de Extremadura y de algunas islas baleares. Por otra parte, marzo ha mostrado carácter normal en Galicia, en casi toda la cornisa cantábrica y en el norte de Navarra. En algunas zonas del interior de Galicia, marzo ha mostrado carácter seco. En el archipiélago canario, ha sido húmedo, con algunas zonas de carácter muy húmedo.

Abril fue húmedo en la mitad oeste de la Península, llegando a ser muy húmedo en zonas del interior peninsular, de Galicia, Aragón, Extremadura y en el archipiélago canario donde ha llegado a extremadamente húmedo en las islas occidentales. Por otra parte, abril ha mostrado carácter normal en casi toda la cornisa cantábrica y la mitad este de la Península y en casi toda Andalucía. En algunas zonas costeras de Cataluña, de la Comunitat Valenciana, del interior de Murcia y en todo el archipiélago balear ha llegado a mostrar carácter seco, llegando a muy seco en algunos puntos, destacando la isla de Mallorca donde ha alcanzado carácter extremadamente seco.

En mayo, el carácter de la precipitación en España mostró notable variabilidad geográfica. En el norte peninsular, especialmente en la cornisa cantábrica, País Vasco y zonas del norte de Castilla y León y Navarra, predominaron los valores normales. En la costa occidental gallega y en Extremadura mayo mostró carácter seco, llegando a muy seco en algunas zonas. En el centro peninsular, se observó alternancia de áreas normales, húmedas y muy húmedas, especialmente en el norte de Castilla y León y partes de Castilla-La Mancha, aunque el sur de esta última comunidad presentó rasgos secos. Andalucía, en su conjunto, registró carácter seco, con amplias zonas muy secas en el suroeste y puntos del interior, aunque el sureste mostró algunas áreas normales o ligeramente húmedas, especialmente en el entorno de Sierra Nevada. En Murcia predominó el carácter húmedo. En el Levante, el litoral fue mayoritariamente seco, mientras que el interior presentó valores normales o húmedos. El noreste peninsular, incluyendo Aragón y Cataluña, combinó zonas normales y húmedas, sin grandes anomalías. En general, Baleares mostró carácter normal. Por último, en Canarias se registró una situación más húmeda de lo habitual, destacando áreas húmedas y muy húmedas en las islas occidentales. En conjunto, mayo fue un mes de comportamiento desigual según las regiones.

Episodios destacados

El mes de marzo de 2025 resultó excepcional en cuanto a efemérides climatológicas de precipitaciones, con registros históricos en numerosas estaciones principales. Las mayores precipitaciones diarias registradas en los observatorios principales se dieron en los primeros días del mes y han sido los 71,1 mm en Jerez de la Frontera/aeropuerto el día 3, los 65,0 mm en Puerto de Navacerrada el día 6, los 63,9 mm en Alcantarilla/base aérea el día 5, los 63,8 mm en Málaga/aeropuerto el día 9, los 61,7 mm en Córdoba el día 10 y los 60,8 mm en Huelva el día 2. En abril las mayores precipitaciones diarias registradas en los observatorios principales se dieron, en su mayoría, en la segunda decena del mes con 63,0 mm en Lugo/aeropuerto el día 11, los 58,3 mm en Vigo/aeropuerto el día 18, los 46,6 mm en Badajoz/aeropuerto el día 12, los 38,8 mm en Pontevedra el día 19, los 27,3 mm en Puerto de Navacerrada el día 3 y los 37,3 mm en Tenerife el día 12, que constituye el valor más alto de su serie desde 1981. Finalmente, en mayo las mayores precipitaciones diarias registradas en los observatorios principales durante el mes se dieron en Molina de Aragón con 30,0 mm el día 10, y en Valladolid con 30,0 mm el día 15; seguidas por los 23,0 mm registrados en Granada/aeropuerto el día 5, los 22,0 mm en Murcia el día 9, y los 22,0 mm en San Javier/aeropuerto el día 7.













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Normales Climatológicos Estándares para el período 1991-2020, elaborados en el Área de Climatología y Aplicaciones
Operativas de AEMET, de conformidad con las directrices marcadas por la OMM en su Resolución 16 (Cg-17).

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