NoviembreNoviembre es mes de lluvias y una de las claves del año agrícola. Felizmente, no creemos que vayan a faltar en 2003 en cuanto finalice el veranillo de San Martín. De momento, las perspectivas son buenas para las sementeras y tierras de labor, al menos para la nacida y desarrollo inicial de los cereales de invierno. La tendencia apunta también a un buen comienzo de la temporada de esquí.
Tras unos días de calma atmosférica relativa, la inestabilidad irá rápidamente en aumento, camino del invierno meteorológico, que llegará relativamente temprano. Después de empezar a llover, al principio de una manera inconexa ya en la primera decena del mes, el tiempo se volverá especialmente peligroso entre los días 11 y 14, propiciado por una profunda borrasca con surco en altura. Las lluvias pueden ser localmente fuertes e intensas, con nevadas de grandes espesores en las montañas altas y vientos fuertes. El descenso térmico será acusado, pudiéndose dar por iniciado el invierno.
Un nuevo ciclo de abundantes lluvias y nevadas puede venir para el menguante del 17 de noviembre, alcanzando su punto más álgido los días 23 y 24. ¡Atención en estas fechas por el alto riesgo de fenómenos meteorológicos extremos! Pasado el temporal hay que esperar días más tranquilos a finales de mes y comienzos del siguiente, aunque no pueden descartarse fenómenos de inercia meteorológica, o vendavales del Norte entre los períodos intermedios del paso de las perturbaciones.
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