Esta vaguada fresca se terminará el fin de semana, en el que el azoreño volverá a asomar su morro por el Cantábrico metiéndonos así sus típicas isobaras este haciendo que el finde y la semana que viene suban las temperaturas. En el sur también, sólo que la anomalía neutra será debida a que las temperaturas en esta época son de las más altas del verano. Eso quiere decir que el sur volverá a tener calor por encima de 35 grados. No es necesario que los termómetros lleguen a los 40 para que haya calor, por encima de 35 ya es mucho. En Portugal volverán a estar por encima de 40 grados debido a estas isobaras generales estes que lo empujarán, claro está, hacia el oeste.
Más a largo plazo parece que la tendencia es que el azoreño permita el paso de alguna que otra vaguada norte más. Tampoco se vislumbra ninguna alta presión noreuropea que bloquee el Atlántico, así es que podríamos seguir siendo punto de visitas de frescor oceánico. El verano sigue ahí, pues, sin ola de calor, pero con el lorenzo hispánico haciendo de las suyas. En cuanto a precipitaciones, el norte lo seguiremos teniendo algo húmedo y el este comenzará a dar tormentas, en ocasiones fuertes.