Queda mucho para los cambios que se entrevén.
Según el americano, a partir del lunes, tras varios días de zonal, el viernes surge un A azoreño que nos mete una vaguada fría con pinta de desembocar en dana hacia el sur. Pero el A se acerca hacia Portugal convertido en un potente 1040 de bloqueo. Que quedemos en su campo de tiro aún está cogido con pinzas.
Según el europeo el jueves y viernes el A azoreño está más verticalizado, con lo que nos mete una baja más profunda, y asciende un poco más al norte, con lo que la baja se quedaría por aquí y no tanto en el sur.
A nivel hemisférico un potente y duradero A entre Alaska y Canadá, ayudado por las altas en el Pacífico norte, inyecta una bolsa cálida hacia el norte, que ya sí se modeliza capaz de notarse en alturas de presiones 500hPa, y disocia la bolsa polar. A mitad de semana a su vez otro A terranovense impulsa parte de la bolsa fría del NE de Canadá hacia Azores. Ese vector hacia Azores, en su viaje zonal hacia el este, podría ser el que llegue aquí a cambiar las cosas.
A la vez en Norteamérica, ya para el jueves-viernes, podría formarse una configuración de altas capaz de romper el chorro en el Atlántico oeste. Esto podría, por armonía de las piezas, dejarnos de nuevo bajo un bloqueo de presiones, o activar el Atlántico con más rupturas de horizontalidad y meandrizaciones aún imprevisibles.
A largo plazo, a una semana, vemos la entrada cerca del polo del chorro en movimiento inverso, una vaguada fría de Terranova hacia el sureste, y aquí una entrada norte moviéndose al este.
Bolsa polar disociada con entrada desde el norte en la península.
¿Porqué este cambio? En mi opinión es por el peso de la zonal, capaz de meandrizarse por fases. El domingo nos pasa una voluta fría por el norte en el paralelo francés. Aquí no se notará mucho. Las siguientes del martes y otra el miércoles la zonal ha bajado y se notarán un poco más. El jueves la zonal baja aún más, llegando a Azores y aquí el viernes-sábado.
La próxima ya es tan baja que ahí es cuando se rompe el chorro ya que Norteamérica envía una bolsa helada muy al sur, entrando incluso en el océano hacia el estado de Nueva York. La bajada es tan al oeste que las piezas del tablero se recompondrían de nuevo a saber en qué posiciones.
No siempre la ruptura de la zonal es así. En este caso ayudaría el empuje hacia el sur en Norteamérica gracias la bipolarización de la bolsa madre.