En unos días se modeliza que va a haber un transvase de fuerzas gélidas de Canadá hacia Siberia. Norteamérica va a templarse algo y Asia se va a enfriar, no tanto en valores mínimos, que puede, como en coherencia y extensión de la gran masa helada. Esto podría significar que el Atlántico se tranquilizaría un poco. Por el sur podrían aparecer las primeras temperaturas preprimaverales y por el norte se podría recibir el último roce del zarpazo frío continental al alargarse el escandinavo hacia la siempre buena posición escocesa, posición que permitiría rozar por el norte la bolsa gélida inglesa.
La fría dana en altura que cruzaría el domingo Inglaterra, se acercaría al norte de Galicia, impulsada por el meandro isobárico del alargamiento dorsal hacia Escocia, para atraer y llevarse finalmente hacia Groenlandia-Terranova la borrasca que nos habría rondado por el oeste. Interesante retrogradación. A la larga el escandinavo emigraría hacia el Mar Negro, dejándonos por el momento en tierra de nadie. Esto se traduce en presiones medias por donde podrían circular brazos húmedos (lluvias) sin casi velocidad pero con tendencia a la dominante oeste, atlántica. No sería descartable algún pequeño ahondamiento en las costas sur o mediterráneas.
Un potente jet stream en Groenlandia, de sur a norte-noreste, empujaría el frío canadiense hacia Eurasia, por lo que lejos de calentarse (es difícil que Groenlandia se caliente) a mi modo de ver, se enfriaría más.
A corto plazo tenemos las lluvias que va a enroscar esta bienvenida borrasca atlántica, fría, sobretodo en las laderas sur de las cordilleras, situación que siempre viene bien para rellenar provisiones ya que suelen ser las menos regadas. La borrasca atlántica bajará hacia el sur por el oeste portugués, se desdoblará en dos, y volverá hacia la península.
Con respecto a las olas las cosas han cambiado ya que la borrasca, cuando vaya hacia el sur, no será tan profunda. Mucha menos fuerza en las predichas en Huelva y algo más de fuerza en las gallegas y Portugal.
Primer mapa, difícil modelización debido a la imprevisibilidad de los desdoblamientos borrasquiles, y segundo mapa, altura de olas el viernes sobre las costas oestes: