El señor Millán Millán quiere dar una relevancia grande al Mediterráneo lo cual me entusiasma mucho. Llega a decir que un aumento de las lluvias fuertes en Gran Bretaña se debe a que agua más salada, densa y cálida por la válvula salina Atlántico-Mediterránea. Me asombra que la influencia del Mediterráneo llegue a las islas Británicas, cuando siempre se está hablando del potencial e importancia de la corriente del Golfo, como determinante, o con una influencia preponderante.
Otra cosa que me asombra es el plazo de 5 años para que se produzca la gran sequía en el Mediterráneo. Toma partido diciendo que hay que aplicar trasvases, el trasvase del Ebro y del Ródano como una solución milagrosa, y regar a manta. En realidad es una batalla perdida de antemano, porque sería imposible hacer esas obras faraónicas en tan poco tiempo.
Quizá lo que no dice es la verdadera razón de donde está el problema, de por qué en verano hay menos lluvias, menos tormentas, y es debido a las construcciones, al cemento que asola toda la costa, que ha hecho que se perturbe la circulación de convección que antes producía tormentas, y que ahora brillan por su ausencia. Las construcciones de cemento son como una barrera que impiden que el aire húmedo y caliente del mar llegue con facilidad a las zonas interiores del Mediterráneo. Las edificios se comportan como una muralla, que se recalienta con el sol, pero que solo manda aire seco, el aire húmedo y cálido del mar no asciende.
Además las lluvias en el verano hace tiempo que son escasas, y que las tormentas reinan por su ausencia y no son las que determinan los ciclos de sequía. Las lluvias importantes son el resto del año, dentro de la gran irregularidad del clima Mediterráneo.