El viernes estuve recorriendo las afiladas rocas testigo de la erupción prehistórica del volcán de Güímar, Montaña Grande, que debió ocurrir en torno al siglo XIV.
Se trata de un paisaje desolador y impresionante. La foto está tomada a un centenar de metros de la línea de costa, y desde allí se divisa en primer plano el tabaibal, el cono, y detrás, la cordillera dorsal de la isla, que alcanza los 2717 metros de altitud en el Alto de Guajara. El Teide queda detrás de esa mole y no se ve desde aquí. Ahora no tengo tiempo, pero mañana pondré más fotos. Un saludo y que les guste. Aún no le he cogido el tranquillo del todo a la cámara.