Efectivamente, NO SON LO MISMO.
Cada uno en su sitio
Libélulas y caballitos no son lo mismo, ni mucho menos. Aunque pertenecen al mismo orden (Odonatos), y su aspecto es similar, hay notables diferencias que permiten distinguirlos si se quedan un rato quietos (algo no siempre fácil). Las alas de los caballitos (dos a cada lado) son practicamente iguales, mientras que las libélulas tienen las posteriores algo más anchas. Cuando están posadas, el caballito tiene las alas juntas o ligeramente separadas mientras que la libélula las despliega por completo. Los ojos, grandes y facetados en ambos subgéneros, están situados a ambos lados de la cabeza en los caballitos, mientras que en las libélulas están juntos sobre la cabeza. Esta característica hace que las libélulas verdaderas tengan una extraordinaria visión en un ángulo de 360º. De manera que si había pensado en acercarse por detrás para darle un susto a alguna, olvídelo.