Durante ese período, cabe destacar �por su importancia� las actuaciones de los voluntarios en las inundaciones que sufrió el municipio en 1989, que arrasaron el Camping de Bolnuevo y que, además de considerables daños materiales, ocasionaron una multitud de damnificados y dos víctimas mortales. También hay que señalar la importancia de la colaboración los voluntarios de la agrupación en el rescate de los dos guardias civiles fallecidos en la tristemente famosa "cueva del agua".
http://www.proteccioncivil.org/gl/DGPCE/Informacion_y_documentacion/catalogo/carpeta06/revispc11/rpc11_30.htm.
http://www.ametse.es/foro/index.php?topic=115.0El texto siguiente se refiere a la inundación que arrasó en 1989 el Camping viejo de Bolnuevo en Mazarrón (Murcia).
"El día 7 de Septiembre de 1989, después de caer lluvias torrenciales de corta duración en la casi totalidad de la cuenca del Segura, se originaron crecidas en la mayoría de los cursos de agua y las correlativas inundaciones en gran número de casos. En la cuenca de la rambla de Las Moreras cayeron volúmenes de precipitación que sobrepasaron los 100 mm entre una hora y una hora y cuarto. Estas escorrentías generadas y concentradas por diversos cursos confluyeron a tres kilómetros y medio, aguas arriba del puente de la Cra. de Mazarrón-Aguilas, lo que produjo una punta de avenida estimada en 500 m3/s, que se vertió en el cauce de la rambla de las Moreras propiamente dicha.
Según cálculos realizados por la Confederación Hidrográfica del Segura, los caudales circulantes fueron del orden de 250 m3/s para la rambla de Murcia y de 1300 m3/s en la rambla de Las Moreras, a casi un kilómetro aguas abajo del puente de la Cra. Mazarrón-Águilas. A estos caudales punta no se unieron los procedentes del Embalse de Puentes sobre el Guadalentín, ya que llegaron laminados con posterioridad a la riada que asoló la desembocadura de Las Moreras.
La onda de avenida de varios metros de altura, al estrecharse el cauce de la rambla a un kilómetro y medio en dirección al poblado de Bolnuevo, desbordó el lecho de inundación estacional y arrasó infraestructuras urbanísticas, invernaderos agrícolas y el propio camping de Bolnuevo; obras que se hallaban dentro del lecho natural de inundación episódico de la rambla y en el delta de la desembocadura. Ni siquiera un muro de hormigón de 3 metros de altura y 150 metros de largo fue lo suficientemente fuerte para evitar el desbordamiento y canalizar las turbulentas escorrentías. El agua lo rompió, volcó y asoló el camping.
Las lluvias máximas ocurrieron entre las 11,30 y 12,30 horas, originándose el caudal punta entre las 01,50 y 02,00, hora en que llegó al puente, cuyos vanos resultaron insuficientes para evacuarlo, rebasando el agua unos 2 metros por encima. Minutos después, la onda de avenida llegó al mar, no sin antes abrirse por ambas márgenes del delta y arrasar todo a su paso.
Una construcción contribuyó a modificar el curso de las aguas: la existencia de un muro de protección de tierra, en la margen derecha, próximo a las instalaciones de una cantera. Este muro obstaculizó uno de los brazos, temporalmente funcional, que tenía la rambla en la zona del delta y que precisamente separaba el camping viejo del más reciente de Bolnuevo.
Otro de los hechos a considerar es la reducida luz del propio puente, que ante la avalancha actuó como represa obligando a los caudales sólidos y líquidos a extenderse lateralmente, antes de romperse aquel.
A los pocos días de la avenida, pudo observarse que en las palmeras y postes de la luz que permanecieron verticales, sin arrancar, así como en las edificaciones, había quedado la señal de la cota máxima alcanzada por el agua. Se midieron espesores de la lámina de agua de hasta 4,5 metros." (Rodríguez Estrella, 1993)
http://www.laopiniondemurcia.es/municipios/2009/09/07/tragedia-bolnuevo/195771.htmlhttp://www.fotoparanormal.com/foro/index.php?topic=342.0http://www.trebol-a.com/2005/03/23/la-rambla-de-las-moreras-y-del-reventon/GUÍA AMBIENTAL
RAMBLA DE LAS MORERAS
EL MEDIO FÍSICO.-
El municipio de Mazarrón presenta una geografía cambiante, de contrastes, donde el paisaje se modifica a cada paso, salpicado por macizos montañosos y extensas colinas onduladas que se extienden hasta la misma costa, en el Golfo de Mazarrón.
Desde el Valle del Guadalentín aparece una sucesión de sistemas montañosos que cierran el paso hacia el mar, pero dos circunstancias una orográfica y otra hidrográfica, terminan por franquear el paso. Las cordilleras Béticas que en esta zona abarcan su borde más oriental, están caracterizadas por una sucesión de pequeñas sierras litorales. Sierras que en las inmediaciones de Mazarrón presentan una discontinuidad, ocupada por amplias llanuras prelitorales. Por otra parte, el principal sistema de desagüe de las montañas se realiza a través de la cuenca de las Moreras que permite el drenaje de las aguas hasta el Mediterráneo.
El territorio está caracterizado por una sucesión de agrestes y rocosas sierras, inferiores a los mil metros de altitud, orientadas de SO a NE y recorridas por pronunciados barrancos y amplias ramblas. Al oeste del término municipal se elevan las sierras del Águila, Almenara, los Cucos, Moreras y Herrerías, colindantes con el municipio de Lorca; al este se alza la mole de la sierra del Algarrobo. Esta abrupta orografía posee un extenso entramado de hidrológico que recoge todas las aguas superficiales. Caracterizada por dos grupos de ramblas, las que discurren de las montañas directamente al mar: Valdelentisco, la Raja, Balsicas, Hoya, Villalba, Pastrana y Picachos. Y las que forman la enorme cuenca de las Moreras.
Su situación en el contexto del sureste ibérico, le confiere un clima de tipo mediterráneo, con rasgos climáticos áridos. Con una temperatura media anual en torno a los 18ºC, con inviernos cortos y suaves y veranos largos y calurosos, prevaleciendo los días soleados y con escasez de lluvias. Precipitaciones anuales alrededor de 250 mm., caracterizadas por su irregularidad y torrencialidad. El viento, se distribuye por estaciones con predominio: invierno E/NE; primavera SE; verano E y en otoño prevalecen asimismo los vientos del E.
El acceso más cómodo y fácil para conocer la cuenca de la rambla de las Moreras, se puede realizar desde varias de las pedanías del campo: Atalaya, La Majada, Gañuelas o Cañadas de Romero para las áreas altas de cuenca. Desde Leiva, El Saladillo o Camposol para la parte media de la rambla Y desde Mazarrón, Las Moreras y Bolnuevo para el curso inferior y la desembocadura. También resulta de utilidad la red viaria local del interior.
LA RAMBLA.-
La rambla de las Moreras en sí, esta formada por la confluencia de los cauces de distintas ramblas y barrancos que desaguan las sierras, recogiendo las aguas de toda la cuenca de recepción y que se van sumando en su discurrir hasta alcanzar el Mediterráneo en su desembocadura de Bolnuevo.
La rambla de las Moreras se configura a partir de la unión de dos ramblas principales, del Reventón y Murcia. Esta tupida red fluvial, comienza en la sierra de Almenara, de su cara norte descienden las ramblas de Adanes, Carrascas, Palancar o la Quinta. Por la cara sur, fluye el barranco de Agua Dulce y las ramblas de Baltasar, Cambrón y Lobero. La escorrentía de la sierra del Águila se produce por las ramblas del Lentiscar, Fuente Ágria, Rufina, barranco de Morote, Cañete, Pino, Tomillo y Majada. La sierra de las Moreras aporta las ramblas de la Atalaya, Fuente de la Meca y Coto Fortuna. De las lomas que lindan con el Valle del Guadalentín las ramblas de los Aznares y Bichue. En la margen izquierda recorren la sierra del Algarrobo y sus estribaciones, con las ramblas de la Fuente, Pinilla, Palomas, Saladillo, Saltador, Yeseras, Algarrobo, Culebra, Noguera, Perdiz, Rincones, o Fuente Salada. Esta red fluvial recoge las aguas de una superficie de unos 150 km2, siendo una de las ramblas litorales de mayor entidad.
Encierra unas características ambientales naturales y culturales muy peculiares que vienen determinadas por los distintos usos a los que se someten tanto sus aguas, como sus cauces. Aguas que discurren por una cuenca preeminentemente margosa, configurada por paisajes acarcavados de badlands, esto condiciona las características físico-químicas del agua, con una enorme variación desde su cabecera a la desembocadura. La salinidad, conforme se desciende se incrementa como consecuencia del continuo lavado y aporte de sales, siendo típicos valores medios entre 6-13 g/l. Predominan las aguas sulfato-clorurado sódicas, resultado de unos sustratos, rico en yesos (sulfato cálcico) y sal común (cloruro sódico).
Los cauces discurren encajonados entre elevados taludes desprovistos de vegetación, que pueden alcanzar 10 ó 15 m de altura, éstos sufren frecuentes derrumbamientos debido a la facilidad con que las margas, son erosionadas por el agua. Provocando un elevado cambio tanto del lecho como de sus márgenes, sujetos a continuas modificaciones. Predominan los amplios lechos en los que el agua, fundamentalmente con carácter temporal, circula en una estrecha lámina de escasa profundidad de 2 a 15 cm. Lechos constituidos por abundantes sedimentos que van desde los cantos, en la margen más externa del cauce, hasta las arenas y/o arcillas en el centro del mismo.
En la zona baja de la rambla aparecen dos humedales asociados, la naturalizada Gravera de las Moreras y la Charca Litoral de Las Moreras, la primera consecuencia del relleno de antiguas graveras con aguas depuradas y la otra producida por la barrera arenosa de la desembocadura.
La climatología y este tipo de ramblas propician avenidas de consecuencias catastróficas, la rambla del Reventón aportó 500 m3/s a la riada de 1989, con un caudal final en la rambla de las Moreras de 1.300 m3/s, que arrasó el camping de Bolnuevo.
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