AEMET ha estado gestionando muy bien la situación que se avecina, siendo más prudente ha conseguido afinar bastante en los avisos (por ejemplo Euskalmet, me temo que se pasó emitiendo un aviso naranja por rachas de más de 120km/h en buena parte del territorio), ya que el viento no parece que vaya a alcanzar tanta intensidad como algunos modelos veían hace 2 días en las comunidades cantábricas. Sin embargo han hecho un cambio de última hora que me ha dejado a cuadros: Segovia pasa de aviso amarillo a estar sin aviso, y la meseta de Ávila baja de aviso naranja a ninguno a 6
horas de comenzar el episodio... Y lo peor es que este último cambio, a pesar de ser muy importante (de un aviso naranja a no haber nada hay mucha diferencia), no creo que se corresponda con la realidad. Se van a superar los umbrales de viento tanto en el Sistema Central de Segovia como en la zona sin aviso de la Meseta Norte.
Aunque estuvieran en lo cierto, no es prudente eliminar un aviso generalizado que lleva gestándose días a 6 horas de llegar el episodio (que parece tener papeletas de superar los umbrales de aviso) aunque tenga tendencia a ser menos virulento de lo esperado, pero es que en mi humilde opinión (espero equivocarme), no están en lo cierto.
El Sistema Central, es percibido por los modelos (incluso algunos de alta resolución), como una línea montañosa un tanto homogenea, al igual que ocurre con otras cordilleras, sin embargo tiene ciertas irregularidades que permiten que los vientos de ladera también sean muy significativos, aunque más locales, con oestes y suroestes (flujo paralelo o casi paralelo a la cordillera) y no solo con componentes perpendiculares (nortes-noroestes y sures). Por tanto los modelos tienden a infravalorar en ciertas ocasiones la velocidad del viento con componentes como la de mañana en toda esta zona. Sin embargo, con un flujo de vientos tan potente y con cierta estabilidad en capas bajas que tendremos asegurada durante el paso del frente cálido, el viento al rebasar las cimas se va a desplomar en las zonas de sotavento generando vientos de ladera que recorrerán buena parte de la vertiente norte a gran velocidad, internándose incluso en la meseta de forma bastante significativa.
Un saludo.