Por Valencia, pufo. Y por comarcas de Alicante, más de lo mismo. Hace días no daban más que meras lluvias y cayeron 120 litros en determinadas zonas, incluso nos comimos 50 en Dénia casi de la nada, y ayer había una alerta amarilla para 1 mm, igual que en Valencia, para 5 mm
A partir de las 9 de la noche, relámpagos, sin más. A partir de las 12-1 de la noche, relámpagos de nuevo, a las 2 de la madrugada, festival de aparato eléctrico, sin más, calculaba unos 10-12 kilómetros de distancia, pero aproximándose. Así fue, y a las 2.30 en adelante, empezó a gotear, sin aparato eléctrico. Fue en aumento. Durante un buen rato cayó, a principio con entidad, luego a ritmo de diluvio y, finalmente, en torno a las 3-3.10, en un chispeo en que todo se deshizo, dejando en unos 20-30 minutos 5-6 litros. A las 3.05, cuando dejaba de llover prácticamente, en esa transición, comenzó un vendaval de la nada que duró un rato importante y que bajó las temperaturas, con rachas de 50, 60 y 70 kilómetros por hora, con las persianas traqueteando, con todas las hojas volando por la calle, la gente dando las luces, mobiliario urbano por los suelos y bastante gente despierta incrédula. Pocas veces he visto algo igual, de veras. A la hora empezó a cesar y hoy está en calma absoluta, aunque encapotado. Nada interesante. Las alertas, como siempre, de adorno.