Episodio por el que no daba un duro, realmente, en Valencia, bastante generoso. Ya durante el fin de semana y el lunes se apreció gran inestabilidad, sin alcanzarnos, en forma de cumulonimbos de diversos tipos, que se concretó el martes, día 23, con un generoso diluvio por la tarde, entre las 16 y las 18 horas, que dejó cerca de 20 litros en la capital. Esa misma noche nos despertaría otro aguacero, como el que aconteció el viernes, que redondearía las cifras, más próximas a los 30 litros en las estaciones de la ciudad. Escaso aparato eléctrico.
Tras la calma del día 24, al menos, relativa, llegó el día de ayer, en que ya se avistaban nubes bastante negras en dirección oeste-suroeste, y truenos en dirección sur-suroeste, que luego tuvieron componente este, posiblemente por la situación de inestabilidad atmosférica. No se debió esperar más allá de las 16h para ver caer las primeras lluvias, poco abundantes pero con gran aparato eléctrico a distancia que dejaban los primeros litros de la jornada. Se vieron redondeadas por diluvios de alta intensidad y corta duración entre las 22 y las 00 horas, que redondearon la cifra por encima de los 15 litros sin, casi, percatarnos, pese a que la sensación era de que había llovido mucho más por la tarde, quizá por haber estado más repartida la lluvia en el tiempo. La temperatura permaneció baja, entre los 16 y 18 grados, al menos a nivel de sensación térmica, costándonos mucho estos días subir de 20 grados. Finalmente, de madrugada, también llovió, discreta pero sostenidamente, y ha vuelto a dejarnos unos litros en el acumulado diario, otro día más mojando.
Por el momento, salvando tenues chispeos a primera hora de la mañana, que no se han reeditado, el cielo permanece nublado, no se aprecian, por el momento, nubes amenazantes, el viento permanece en relativa calma y luce, sin mucho poder, el Sol que, ayer, si bien brillaba por su ausencia, cuando salía lo hacía de forma muy intensa, con sensación de bochorno y cierta calima en el ambiente. No ha vuelto a llover, veremos si sucede algún cambio de última hora en un episodio que ha dejado casi 50 litros en poco más de media semana de lluvias, muy caracterizadas, salvo el martes, por arreones, por minutos, de índole torrencial. Parece ser que todavía no nos despediremos, por completo, de la inestabilidad.
Buen temporal, al menos, en la ciudad de Valencia, bajo mi punto de vista, que deja las primeras lluvias en más de 3 meses, que no fueron escasas, tampoco, en dicho momento, y arregla algo más el año ('como agua de mayo') que, eso sí, debe ser algo más regular, y dejan temperaturas más propias de la primavera, incluso frescas por momentos, que, esperemos, no vuelvan a estar en la tónica del mes de abril, donde fueron asfixiantes por momentos.
Como comenté, por cierto, en Polos del Frío, enhorabuena por haber añadido la estación meteorológica de Camporrobles. Tenemos a la 'Siberia' de la Comunidad Valenciana entre nosotros, digna 'rival' de Mira y de San Blas en cuanto a mínimas absolutas se refiere, y -bajo mi punto de vista-, la de menor media anual que habrá, para la comarca, en la red AVAMET. Pero tiempo al tiempo.