Elvira Rodríguez Herrer, hasta entonces Secretaria de Estado de Presupuestos y Gastos, fue designada el pasado 3 de Marzo como nueva ministra de Medio Ambiente, en sustitución del anterior ministro Jaume Matas.
Licenciada en Ciencias Económicas y Comerciales, a lo largo de su carrera, Elvira Rodríguez ha desempeñado diversos cargos de responsabilidad en la Dirección General de Presupuestos, en la Intervención General del Estado y en el Tribunal de Cuentas.
Profesionalmente, es inspectora de finanzas del Estado, procedente del Cuerpo de Intervención del Estado. Como tal ha estado destinada en la Delegación de Hacienda de Sevilla, o en la Dirección General del Tesoro.
De 1981 a 1983 fue miembro de las comisiones encargadas de la confección del primer plan general de Contabilidad Pública.
De l978 a 1984 ocupó la subdirección en la Intervención General de la Seguridad Social.
En 1984, fue nombrada subdirectora general del Tribunal de Cuentas, cargo en el que se mantuvo hasta el primer semestre de 1996. Durante esta época dirigió los trabajos y confeccionó el informe sobre la Cuenta General del Estado que realizó este organismo para el Parlamento.
De 1991 a 1994 fue representante del Tribunal de Cuentas en la Comisión de Principios y Normas Contables Públicas.
El 24 de mayo de 1996 el Consejo de Ministros la nombró Directora General de Presupuestos, en el Ministerio de Economía y Hacienda.
En enero 1997, fue cesada como miembro del Consejo de Administración de Telefónica, a consecuencia del nombramiento de un nuevo Consejo.
Cuatro meses después, fue designada por el Consejo de Ministros representante de la Administración General del Estado en la Comisión Mixta del Cupo Vasco, cargo que renovó en marzo del 1999.
El 5 de mayo del año 2000 fue nombrada secretaria de estado de Presupuestos y Gastos, en el ministerio de Hacienda.
Tenemos pues, a una persona de un gran prestigio personal, sin embargo, la experiencia en temas medioambientales de la misma es, nula.
Resulta pues, un tanto contraproducente dicho cambio radial en la temática de la actividad profesional de la misma. No es que ignoremos que el aspecto económico juega un papel muy importante en la gestión medioambiental, sin embargo, no se puede realizar una gestión sectorializada. Y con este tipo de ministros que ultimamente desempeñan esa función, Isabel Tocino (Licenciada en Derecho), Jaume Matas y Elvira Rodriguez (Licenciados en Ciencias Económicas) es difícil realizar una gestión integral del mismo, ya sea quizá más bien, porque no interese a este gobierno.
Es el Medio Ambiente, un tema muy tenido en cuenta a la hora del desarrollo de las campañas políticas, ya que constituye un tema candente en la actualidad, dotado de una alta sensibilización por parte del pueblo..., es decir, podríamos decir que dicho Medio Ambiente esta "de moda". Apareciendo por tanto, multitud de propuestas políticas, declaraciones de intenciones, proyectos..., que muchas veces se quedan en papel mojado o son llevados a cabo de una forma ineficaz o incoherente.
Y es que resulta bien diferente las intenciones "a priori" de un partido, respecto a la posterior actuación que desempeña.
A mi modo de ver, el Ministerio de Medio Ambiente en España, es un ministerio vacio, sin un peso importante (tal como lo pueda tener en otras países europeos como Alemania, Francia, Suiza...). Mas bien un ministerio de los que llamo de "maquillaje" para tapar otras cosas o colocarnos el adjetivo de "verde", aunque en ocasiones dicho maquillaje puede correrse y pasar el verde a negro.
Y es que la mayor parte del presupuesto que la nación dedica a investigación va destinado al que yo voy a comenzar a llamar "Ministerio de Guerra" (de Defensa), dando a conocer cuales son los objetivos primordiales de nuestro gobierno.
Gestores poco eficaces, poco formados y poco involucrados: hechos como la rotura de la balsa de Aznalcollar, la crisis de las Vacas Locas, el desastre del Prestige y otros muchos más desastres, que no siendo de tintes tan catastróficos, son de equiparable daño medioambiental, nunca terminarón y creo que, según la involucración de los mismos, podrán terminar con la dimisión de alguno de estos gestores, simplemente se parchea y se continua hacia delante. O si no, que vaya media España a resolver el entuerto.
Resulta irónico, pues dicho ministerio debería encontrar los enemigos en los otros campos como el económico..., y sin embargo, los encuentra en su propio bando, en numerosos grupos ecologistas y colectivos ciudadanos que ven perjudicados sus intereses. Fruto de dicho descontento resulta la gran cantidad de manifestaciones que han de desarrollarse.
Esperemos que el Medio Ambiente ocupe el lugar que realmente merece en la gestión política nacional, concebiendose la idea de que es posible el desarrollo sostenible en realidad, (a ver si se creen ya los anunciones que nos ponen en la televisión: "Si, el hombre es inteligente si, que comiencen a demostrarlo"), nos dejemos de parcheos, maquillajes y declaraciones de buenas intenciones, de seguir sin ver los problemas ambientales actuales.
Lo preocupante es pensar, que tipo de catástrofe o problema debe de ocurrir para que nos demos (y me incluyo también) cuenta de que la actitud que desarrollamos no tiene ninguna componente de racional.
¿Qué opinas sobre todo esto vosotros?