Muchas gracias a todos por la info y las fotos, especialmente a los carbayones, que me habéis hecho saltar las lágrimas (en serio). Y es que ver tu ciudad blanca y radiante tiene un encanto que nadie puede resistir; seguro que ni siquiera los amantes del calorcillo como Levante/Mompe.
Me temo que si vuelvo a vivir en Oviedo algo comparable a febrero del 96, besaré la nieve, comeré nieve, me revolcaré en ella como un crío.
Bueno, ahora a esperar acontecimientos, pero sin lanzar las campanas al vuelo, que si la semana que viene se va todo para los italianos, el batacazo será de órdago a nivel nacional.
Afortunadamente para mí, ya vaya a España o a Italia, la entrada ártica pasará por Bretaña.
Waiting for magic
Is what I do
Waiting for magic
For me and you