En la sierra de Gúdar (Teruel) donde resido actualmente, a parte de que las temperaturas son frías, no a oleadas muy frías como el año pasado sino con una homogeneidad fria mantenida desde noviembre.
Por otro lado este invierno el número de días de nieve y días en el que se ha mantenido nieve en el suelo es bastante superior a muchos anteriores.