Buah, no se ni que decir... A Antonio tuve la oportunidad de conocerlo en la primera meteoruta a la que asistí aquí en Sevilla, y me pareció una persona de las más respetables y respetuosas que he conocido nunca. Su tranquilidad y sosiego, a la vez que sus conocimientos, hacían de las charlas con él un verdadero placer.
Con él era con el único que ponía las mayúsculas y las tildes por messenger, pues escribía tan bien que escribir a lo "sms" parecía una falta de respeto hacia él.
Atrás quedarán los días en los que me preguntaba: "Qué Javi, ¿Cómo está el tiempo por Triana?" Y las veces que lo he visto por la calle, con el brazo por encima del hombro de su esposa, acompañado de alguno de sus hijos a los que tanto cariño tenía (y siempre tendrá) y de los que con tanto orgullo hablaba.
Para mí ha sido un mazazo tremendo, la verdad jamás podía imaginarme algo así...
El abrazo más grande que se haya dado nunca para su familia y amigos
Antonio, nunca te olvidaré... Espero que nos sigas trayendo las cartas desde el cielo
DEP