Con frecuencia las inundaciones causan daños materiales y muertes, por lo que se consideran desastres naturales. De hecho las inundaciones son las responsables del 40% de todas las muertes por desastres naturales en todo el mundo.

Sin embargo en algunas partes del planeta las inundaciones forman parte del ciclo meteorológico anual. Durante miles de años las crecidas del Nilo han sido la base de la agricultura y por consiguiente de la civilización. Hou en día muchas regiones tropicales dependen de las inundaciones anuales para el riego de las cosechas y para el almacenamiento de agua para los meses secos del verano.

Existe gran variedad de condiciones meteorológicas que pueden causar inundaciones, pero se pueden distinguir dos tipos básicos: Las riadas y las inundaciones a gran escala. Cada una de ellas tiene diferentes causas, características y ritmos.

Las riadas se dan cuando la absorción del suelo, el alcantarillado o el simple fluir del agua no pueden dispersar la cantidad de lluvia caida. La causa más frecuente de las riadas son las tormentas de desplazamiento lento, que dejan caer enormes cantidades de agua en una zona pequeña en muy poco tiempo. Las tormentas de desplazamiento rápido son menos problemáticas en ése sentido, por que reparten la lluvia en una zona más amplia.

Las riadas se dan en valles y gargantas. Cuando el viento húmedo sopla hacia una montaña, se eleva y puede desarrollar una tormenta que descargue lluvias torrenciales. Si los vientos mantienen a la tormenta estacionaria, el agua puede bajar desbocada desde las laderas hacia el valle. Las gargantas actúan como embudos; aumentan la fuerza del caudal y pueden llegar a adquirir tal violencia que destruya todo lo que encuentra a su paso.

Aunque resulte sorprendente las tormentas de desplazamiento lento también pueden causar riadas en los desiertos. El suelo duro y seco absorbe muy mal la lluvia, así que un chubasco repentino puede convertir cauces secos de arroyos en torrentes desbocados en muy poco tiempo.

Por razones similares las riadas cada vez son más frecuentes en ciudades. El suelo, cada vez más cubierto de cemento y asfalto, absorbe cada vez menos lluvia. Cuando el alcantarillado se desborda el agua inunda rápidamente calles y plazas.

A veces las riadas pueden ser causadas por las mismas estructuras que se han construído para controlarlas. Aunque los diques y muros de contención suelen resultar eficaces, a veces se quiebran de forma espectacular y desencadenan inundaciones devastadoras.

Aunque las riadas suelen ser devastadoras suelen ser de corta duración y se dispersan tan rápidamente como empiezan. Sus efectos tienen a concentrarse en un área pequeña en comparación con las inundaciones a gran escala.

Las inundaciones a gran escala se asocian generalmente a un sistema frontal, como un frente frío o una célula de bajas presiones que produce lluvia durante un periodo prolongado sobre un área extensa. Este tipo de inundaciones suele iniciarse en un río que se desborda. inunda los campos adyacentes y satura de agua el terreno. A diferencia de las riadas este tipo de inundaciones puede tardar varias semanas en alcanzar su punto máximo.

Los huracanes son una causa importante de inundaciones a gran escala en las regiones costeras y en las adyacentes. Estos sistemas tormentosos producen fuertes lluvias. Cuando un huracán se debilita al llegar a tierra, puede asentarse en forma de depresión, lo que trae más lluvia.

Autores:   Asociación cultural Falla Plaça Malva de Alzira


Gota fría Octubre 1982

Autores: El Correo Digital
26 Agosto 1983....Bilbao

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Categoría: Inundaciones.
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