Copio y pego un artículo publicado en un periódico tinerfeño.
(Diario de Avisos)
Resaltaré en negrita lo más interesante.
----------------------------------------------------------------------------
Los fondos marinos, al desnudo
Investigadores del Instituto Español de Oceanografía hallan pruebas geológicas de la existencia de petróleo en Canarias
Los fondos marinos canarios, que en la llanura abisal superan los cinco mil metros de profundidad, ya no esconden ningún secreto para los científicos españoles.
Sergio Negrín
Santa Cruz
Con la intención de determinar los derechos soberanos sobre la exploración y explotación de los recursos de los fondos marinos, el Estado puso en marcha en 1993 el Programa Oceanográfico e Hidrográfico de la Zona Económica Exclusiva Española, que es el área situada más allá del mar territorial y adyacente a este que se extiende 200 millas náuticas (aproximadamente 370 kilómetros) desde las líneas de base rectas a partir de las cuales se mide la anchura del mar territorial -según describen los artículos 55 y 57 de la tercera convención sobre el derecho del mar de la Organización de las Naciones Unidas-.
El Gobierno de Canarias mostró interés por el proyecto y en 1998 se iniciaron las investigaciones. En los tres años siguientes se recorrió y reconoció el cien por cien de la zona económica exclusiva canaria con el buque de investigación oceanográfica Hespérides de la Armada, al que luego se unió el buque Vizconde de Eza. Durante un mes al año, los científicos y geólogos del Instituto Español de Oceanografía, bajo la dirección del Instituto Hidrográfico de la Marina, que son los encargados de realizar las cartas náuticas oficiales, rastrearon las 200 millas náuticas alrededor de las Islas y hasta la mediana que separa Fuerteventura y Lanzarote del continente africano.
De esta forma se procesaron, visualizaron e interpretaron los resultados batimétricos -modelos en tres dimensiones-, geomorfológicos y sísmicos obtenidos en el marco del programa de investigación. La metodología utilizada incluyó ecosondas multihaz para el estudio, cartografía y caracterización del suelo y formas submarinas, que permite un barrido en abanico del fondo marino cercano a los 150 metros del fondo abisal -con un radio de acción de 130 haces proyectados sobre el fondo a diferencia de los barcos convencionales, que utilizan un único haz y que hasta ahora tenían información sólo de la vertical en la que navegaban-, y estudios geofísicos como la gravimetría, magnetometría y sísmica de alta resolución que caracterizan la naturaleza del subsuelo marino.
El estudio concluyó en 2001 y están a punto de ser publicados los mapas batimétricos, magnéticos y gravimétricos de las islas Canarias. “El objetivo de realizar una cartografía submarina básica en Canarias ya está terminado”, asegura el oceanógrafo y geólogo del Instituto Español de Oceanografía Juan Acosta, que ha participado activamente en el proyecto. “Lo que queda por hacer es el estudio detallado de la multitud de hechos científicos que hemos descubierto en el proceso. Como geólogo marino me interesa la enorme cantidad de avalanchas de sedimentos que hemos visto o los volcanes submarinos detectados y fotografiados desde arriba con un detalle nunca antes visto”, advierte Juan Acosta.
Un número especial de la revista científica internacional Marine Geophysical Researches (Investigaciones geofísicas submarinas), que saldrá a la venta a principios de 2005, estará íntegramente dedicado a Canarias. Los ocho artículos seleccionados expondrán los descubrimientos y fenómenos geológicos hallados durante esta investigación, e incluirán fotos submarinas de los diapiros salinos que se extienden a lo largo del Canal Canario, situado entre Lanzarote y Fuerteventura y el continente africano, y que es “una prueba geológicamente fundamentada de la posible existencia de petróleo bajo el subsuelo canario”, asegura Juan Acosta, las avalanchas de sedimentos, así como las grandes fallas como la situada al noreste de Tenerife, a 3.000 metros de profundidad, “que indica que está activa y se mueve en tiempo geológico reciente”, explica el oceanógrafo español.
Descubrimientos mundiales
En el Canal Canario, que delimita Fuerteventura y Lanzarote de la costa africana,
se han identificado sobre el fondo marino montículos de forma circular a elíptica con relieves sobre el fondo circundante de 75 a 375 metros y diámetro desde 4 a los 8 kilómetros.
La presencia de estos montículos sobre el Canal Canario se atribuye a afloramientos de diapiros evaporíticos correspondientes a las cuencas de la edad Triásica-Jurásica, que se encuentran en el margen africano y que se extienden mar afuera hacia el oeste.
“Estas montañas de vaporitas -sales y yesos- son una auténtica novedad científica a nivel mundial. La razón de estas formaciones se encuentra en que bajo los sedimentos marinos, a miles de metros de profundidad, existen una serie de depósitos de sales y yesos que desde el punto de vista mecánico son plásticos. Cuando se produce una falla que rompe la parte de arriba que es más rígida, lo que está debajo fluye a través de la fractura hasta el fondo del mar”, anuncia Juan Acosta, para quien el hallazgo posee “un interés lateral o secundario, ya que
estos afloramientos de sales están asociados a posibles zonas petrolíferas”.
Aunque el Programa Oceanográfico e Hidrográfico de la Zona Económica Exclusiva Española no tiene como objetivo “una aplicación económica directa”, advierte Juan Acosta, “la investigación oceanográfica y la cartografía van dirigidas a la Defensa Nacional, Administraciones Públicas y la comunidad científica en general. Si descubrimos una aplicación económica se reflejará en los estudios y en los mapas. En cualquier caso, las prospecciones las realiza la empresa Repsol, que es la que debe indagar si hay petróleo o no. El programa de la Zona Económica Exclusiva tiene la bondad de realizar un reconocimiento completo y exhaustivo de los fondos marinos canarios. De esta forma, igual pueden aparecer zonas peligrosas en las que los sedimentos se van pendiente abajo y se generan avalanchas que pueden arrastrar cables submarinos, como encontrar petróleo o zonas de arena que pueden ser explotadas para regenerar playas. El conocimiento del fondo se puede gestionar, explotar y administrar bien”.
Junto al hallazgo de los diapiros salinos y su posible vinculación a la existencia de petróleo en el subsuelo marino canario, los científicos se han sorprendido por el volumen de avalanchas de sedimentos que se han movido ladera abajo. En Fuerteventura y Lanzarote, las islas más antiguas del Archipiélago, “las huellas de arrastre o cicatrices de deslizamiento están aún al descubierto.
Hemos detectado incluso un bloque de roca desplazado pendiente abajo de más de 30 kilómetros de largo sin romperse. Es el segundo en tamaño después de uno que existe en las islas Hawai. Hay que tener en cuenta que las islas volcánicas nacen en el fondo del mar y crecen hasta la superficie. Ese proceso tiene un límite físico. Es como hacer una montaña de arena en la playa. A medida que crece en vertical se desestabilizan los flancos por el efecto de la gravedad. Aunque es algo habitual en las islas volcánicas, el descubrimiento que hemos hecho tiene que ver con la longitud del bloque y en el hecho de que esté intacto”.
Respecto a los volcanes encontrados, como la hilera que se extiende hasta el sur de La Palma, en una dorsal que va de Norte a Sur de la isla hasta el Teneguía, la exploración ha conseguido determinar su ubicación, “aunque no sabemos si están activos, ya que las investigaciones se hacen con sonido”, indica Juan Acosta.
En cualquier caso, lo que sí han podido determinar con bastante precisión es la profundidad de la llanura abisal canaria, de unos 5.000 metros. “Los ecosondas multihaz nos permiten determinar con casi total exactitud el fondo marino. Hay un límite en la resolución de estos sistemas acústicos. Si estamos haciendo un mapa a 4.000 metros, el píxel a esa profundidad sería de unos 100 metros aproximadamente. Utilizando otros equipos de más alta frecuencia nos llevaría cerca del fondo hasta los 5 metros. Eso nos permitiría descubrir objetos de unos 10 metros, como barcos o submarinos”, matiza el oceanógrafo y geólogo del Instituto Español de Oceanografía.
Seguridad nacional
La labor desarrollada por el Instituto Español de Oceanografía en la Zona Económica Exclusiva canaria consistente en realizar unos mapas geomorfológicos y fisiográficos de las estructuras del fondo que pueden ser puestos a disposición de la comunidad científica e industrial, deben estar previamente aprobados por el Ministerio de Defensa, que puede vetar la difusión de algunos datos si su hallazgo puede afectar a la seguridad nacional. “Este proyecto se hace conjuntamente entre los ministerios de Defensa y Educación y Ciencia. En todos los países del mundo con programas sobre la zona económica exclusiva existe esa salvedad. Afortunadamente, después de nueve años de trabajo el Ministerio de Defensa español no ha considerado secreta ninguna zona. EE.UU. declara secreta o restringida toda la información de su zona económica exclusiva. Nosotros somos los líderes en la apertura informativa. Aunque exista esa cláusula en el programa que podría llevarnos a declarar una zona como restringida, hay un interés enorme por ampliar lo más posible su difusión, porque además se trata de un estudio que está pagado con el dinero de todos”, reconoce Juan Acosta.
Otra de las polémicas que se han tratado de aclarar con este estudio es determinar si la zona económica exclusiva canaria que se encuentra en el Canal Canario pertenece o no a la plataforma continental, como asegura Marruecos, que continúa reclamando sus derechos ante la posible existencia de petróleo en esa zona. Según manifiesta Juan Acosta, “la zona no es plataforma continental africana. Habría que decir que en cualquier caso correspondería al antiguo Sahara español; al Frente Polisario. Cuando un país no puede extender libremente las 200 millas náuticas sin que afecte a otro, lo que dice la ley del mar es que se tienen que poner de acuerdo. Esa situación no se da en estos momentos.
Si Marruecos aplicara a rajatabla las 200 millas náuticas de la zona económica exclusiva, llegaría hasta la mitad de la isla de La Palma. La posición española es que lo equitativo es trazar una línea media entre las islas y África. Legalmente no se ha llegado a un acuerdo con Marruecos. Repsol está trabajando ahí porque el Gobierno español le ha dado permiso. Cuando se vaya a explotar habría que ver cómo se establece el acuerdo”.
Además de la oportunidad de determinar la constitución y fisiografía de la zona económica exclusiva del Archipiélago canario, la cartografía marina detallada del suelo y el subsuelo que se ha obtenido tras el minucioso estudio ha dejado al descubierto islas sumergidas, fallas, grandes llanuras abisales e importantes depresiones.
“Los mapas van a tener un nivel técnico altísimo, y se podrá apreciar la fisiografía y morfología del mar. Lo que hemos visto son unos fondos marinos con volcanismos impresionantes y avalanchas espectaculares, además de los diapiros salinos”, apunta Juan Acosta, para quien quedarían pendientes investigaciones en detalle de zonas específicas, como la falla descubierta al noreste de Tenerife. “El Programa de la Zona Económica Exclusiva no cubre las plataformas continentales, es decir, desde la línea de costa hasta los 200 metros de profundidad. El Hespérides es un barco muy grande para operar junto a la costa canaria con la destreza que demuestra en alta mar. Además, se debería realizar un seguimiento de los volcanes activos, como el que hemos denominado Volcán del medio, de los mayores que hemos visto, y que se encuentra aislado en la mediana entre Tenerife y Gran Canaria. Se trata de un volcán importante; un edificio de 500 metros de alto que ya descubrimos en la campaña del Hespérides y al que hemos hecho unas fotos submarinas. Habrá que seguir su evolución y ver cómo se extiende su base”, destaca Acosta.
http://www.diariodeavisos.com/2004-12-08/noticias/islas/archipielago/P68691Z.html
2 Respuestas
2117 Vistas