Hola,
El pasado sábado 30 de Abril realicé una ruta a pie por la zona centro de Asturias, en los dominios del macizo de Ubiña por la vertiente del concejo de Quirós.
El objetivo principal era ascender a Peña Rueda, una pirámide caliza de 2155 metros de altura, y excelente balcón de un mosaico de camperas y bosques de acebos y hayas conocida como los Puertos de Agüeria.
La ruta sale del pueblo de Lindes, a unos 900 msnm. El día amaneció bastante oscuro y brumoso, si bien fue despejando a lo largo de la tarde.
Durante la ascensión por el borde sureste de la montaña se observa en la ladera opuesta la gradación de color de los pastos, de color más pardo allí donde la nieve ha tardado más tiempo en retirarse. La calidad de las fotos no es demasiado buena, la verdad:
Ya en la cima, se observa al otro lado y unos 600 metros más abajo los Puertos de Agüeria, todo rodeado por montañas que superan los 2000 metros de altura.
Mirando hacia el suroeste:
hacia el noroeste se aprecian las paredes de roca del macizo del Huerto del Diablo. Es como una muralla caliza que se prolonga fuera de la foto. Al otro lado está León y las montañas de Somiedo:
En vez de regresar por el mismo sitio, decidí descender hacia Agüeria por las laderas boscosas:
Caballos pastando en los prados de un mundo tranquilo:
La idea era descender hasta un riachuelo y seguir su cauce atravesando un desfiladero que flanquea Peña Rueda, para regresar finalmente al pueblo de partida.
Si los puertos de Agüeria son un jardín en el patio central de un castillo hecho de montañas, el portón principal del castillo es el desfiladero de la Foz Grande.
El riachuelo:
y aguas abajo...
árboles y arbustos arrancados de cuajo. La explicación en la siguiente foto:
Aun quedaba nieve cubierta de tierra y piedras, las avalanchas han debido ser considerables este invierno.
Más adelante:
estamos a unos 1400 msnm. Daba la impresión de que algunos árboles habían cruzado el riachuelo y ascendido unos metros por la ladera opuesta empujados por la nieve
queda muy poco para entrar en el desfiladero, al fondo.
A la izquierda los contrafuertes de Peña Rueda:
El desfiladero está poblado por hayas, muchas permanecían desnudas y otras ya se habían vestido de verde:
Bajando, más restos de aludes:
De vuelta en Lindes atardecía en una atmósfera, ahora sí, casi completamente despejada, que permitía apreciar en los montes el color del bosque caducifolio, pardo por las ramas huérfanas de hojas en las zonas altas.
Quién dice que no se pueden poner puertas al campo?...
Espero que el reportaje haya sido de vuestro agrado,
un saludo a tod@s.