Los medios de comunicación también se han hecho eco de las diferencias en Aragón, aunque desde un lado bastante pesimista. Fuente: Heraldo.es
METEOROLOGÍA-ARAGÓN
Agosto ha sido apenas un grado más fresco que la media histórica
Tanto las máximas como las mínimas fueron normales, aunque el cierzo agudizó bastante la sensación de frío.
A pesar de que los aragoneses tienen la percepción de haber pasado un agosto especialmente frío en comparación con otros años, el análisis de las temperaturas registradas en Zaragoza, Huesca y Teruel en las últimas semanas muestra que el segundo mes del verano ha sido apenas un grado más fresco de lo habitual. Tanto las temperaturas máximas como las mínimas se han movido dentro de los parámetros normales, aunque es verdad que el cierzo que ha soplado muchos días ha agudizado bastante la sensación de fresco.
Además, a los efectos del viento hay que sumar el contraste con las temperaturas extremas que se vivieron en julio, un mes calificado como "extremadamente cálido" por el Instituto Nacional de Meteorología que sí rompió los valores medios que se registran habitualmente en la Comunidad -sobre todo en el caso de Zaragoza-.
Gran contraste con julio
La capital aragonesa registró una temperatura media que en el caso de las máximas superó hasta en cuatro grados el promedio histórico y que se situó por encima de los 20 grados en las mínimas, lo que hizo que el calor también fuera agobiante de noche. Curiosamente, la ciudad ha vivido un agosto mucho más plácido. El mes recién acabado ha dejado una temperatura media de 23,7 grados, cuando el promedio de los últimos 30 años se sitúa en 24,4 -solo siete décimas de diferencia. Ese comportamiento se ha mantenido tanto en las temperaturas máximas -29,9 de media frente a 31 de valor histórico- como en las mínimas -17,5 frente a 17,8-.
En Teruel, los registros han sido muy parecidos. Si la media de agosto en las últimas tres décadas ha sido de 21,3 grados, este año el mercurio se ha situado en 20,5 -ocho décimas por debajo-. Las máximas se han quedado en 29,6 -el promedio son 29,7- y las mínimas sí han sufrido un bajón algo mayor al llegar hasta 11,4 grados -lo habitual son 13-.
El Centro Meteorológico Territorial (CMT) de Aragón, La Rioja y Navarra está teniendo problemas en su observatorio de Monflorite -el aeropuerto de Huesca-, por lo que no todavía no hay datos sobre la media y las máximas de agosto. Sin embargo, las mínimas se han situado en 14,5 grados, casi dos por debajo de la media histórica en lo que supone la mayor variación registrada en las capitales aragonesas.
Curiosamente, a pesar de estas cifras no se puede decir que no haya hecho mucho frío, ya que en torno al día 14 en algunos puntos los termómetros bajaron incluso por debajo de los 6 grados. El meteorólogo Alberto Desentre, miembro del equipo técnico del grupo de Predicción y Vigilancia del CMT, considera que, si hay algo que destacar del mes recién acabado, es el cierzo. "Después de la ola de calor de julio se ha producido un episodio de vientos del norte que en el Valle del Ebro han provocado que la sensación térmica fuera de frío -comenta-. Eso no quiere decir que la percepción de fresco de la gente no fuera real, sino al contrario".
"Las pautas ya no valen"
Para Desentre, las temperaturas extremas de julio y el cierzo de agosto han sido dos fenómenos distintos que se han sucedido. No obstante, el meteorólogo reconoce que el contraste entre un mes y otro es un indicador más de que el clima está cambiando. "Hasta ahora se producían unos comportamientos estándar, pero la atmósfera está revuelta y esas pautas ya no valen -indica el técnico del CMT-. Lo normal es que en el Valle del Ebro los episodios de cierzo duren como mucho tres días, y este mes de agosto hemos visto que se han prolongado hasta dos semanas".