Los Puertos de Aliva tienen un encanto y una belleza difícil de olvidar.
Si alguno de vosotros va algún día por esos lugares, no dejéis de visitar la "Fuente del Resalao", donde nace el rio Duje; un agua fresca, limpia y sin contaminantes de ningún tipo (allá arriba no hace falta el cloro que bebemos todos los días); agua recién salida de las entrañas de la montaña.
NO dejéis tampoco de daros una vuelta por la Lomba del Toro, una antigua morrena glaciar de cuando Aliva era un glaciar en toda regla y desde allí ver la mole impresionante de Peña Vieja y Peña Olvidada, unidas sólo por un fino cordal.
O admirar la arista increíble del Espolón de los Franceses (un lugar que ha dado más víctimas dentro de los alpinistas que el famoso Naranjo de Bulnes) Ya se sabe...unos cardan la lana y otros se llevan la fama......
O visitar las antiguas minas de blenda, al pie de la Canal del Vidrio que sube vertiginosa hacia el Hoyacón de Villasobrada; de ahí se extraía el mineral hasta no hace mucho tiempo bajandolo por Fuente Dé al llano. No en balde, el teleferico de Fuente Dé surgió precisamente de la idea de uno de aquellos ingenieros de minas que descendió desde El Cable a Fuente Dé en uno de los canguilones en los que se bajaba el mineral.
En fin....hasta el mismo nombre de Aliva (con acento en la primera "a", resulta sugerente.
Buen reportaje, Culebre.