El ‘moco de roca’ levanta la alerta entre los pescadoresEl del río Porma es el tercer caso que se produce en toda EspañaAgentes de medio ambiente de la Junta de Castilla y León y guardas de río de León y Palencia mantuvieron ayer una reunión en la propia zona afectada del Porma en Boñar, tras la aparición del alga diatomea conocida como ‘moco de roca’, que puede provocar importantes daños medioambientales al hábitat de los invertebrados acuáticos, principal fuente alimenticia de las truchas. Saúl Blanco, biólogo e investigador de la Universidad de León, expuso a los presentes las evoluciones del alga, ya que es el tercer caso que se da en España. La primera de ellas fue en el río Ara, en Huesca, en 2005, río que también está regulado, como el Porma; y en los años 2007 y 2008, en el río Revinuesa, en Soria. El ciclo de permanencia suele oscilar entre uno y seis meses. Esta diatomea fue detectada el pasado 8 de mayo por el guarda de río de la zona. “Nosotros en principio creíamos que provenía de algún colector y revisamos varios de la zona, porque es bastante parecida a la celulosa. Pero al ver que por ninguno de ellos salía nada parecido, de inmediato nos pusimos en contacto con Confederación Hidrográfica del Duero e hicimos un seguimiento de todo el río. Con ellos se decidió avisar a los encargados de realizar las muestras y, tras sus análisis, dieron la prueba del ‘moco de roca’ ya el día 11 de mayo”, comenta uno de los agentes encargado de la zona afectada.
A partir de hoy, agentes medioambientales y también los guardas de río llevarán una campaña para aleccionar e informar a los posibles pescadores que se acerquen a este tramo del río con intenciones de practicar la pesca. El objetivo principal es que atiendan a las recomendaciones que realizan las autoridades para un caso como éste, y que son: Si es posible evitar la pesca y actividades recreativas en este tramo, comprobar que la ropa y el material que ha estado en contacto con el agua no está infectado, limpiar el material de pesca sumergiéndolo diez minutos en agua a una temperatura de 60 grados o congelarlo, descontaminar la superficie de las embarcaciones que hayan estado en contacto con el alga y evitar los baños ya que puede provocar irritaciones, ya que el principal transmisor de este alga invasora es el hombre.
La CHD prohíbe la pesca en el río Porma por el ‘moco de roca’Evitar la propagación de este alga invasora, el objetivo
La noticia más triste para los pescadores se confirmó ayer: el Boletín Oficial de Castilla y León publica hoy la prohibición de pescar en los que se consideran algunos de los mejores cotos del río Porma, desde la minicentral de Cerecedo hasta la piscifactoría de Vegas del Condado.
Desde que el ‘moco de roca’ (como se le conocen popularmente al Didymosphenia geminata), fuera detectado hace poco más de una semana en el tramo del río Porma que discurre entre Boñar y Cerecedo,las autoridades habían recomendado que no se pescara en todo el Porma, con el objetivo de evitar su propagación, ya que el material de los pescadores y las embarcaciones son el principal transmisor (de hecho, ésa es la forma a través de la que el alga pudo llegar a aguas del Porma). Como era de esperar, esa recomendación no fue respetada por muchos pescadores que tenían coto. Por eso, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León y Confederación Hidrográfica del Duero (que trabajan en colaboración con el departamento de Ecología de la Universidad de León) han decidido prohibir la pesca y las actividades de recreo en el mencionado tramo del río, prohibición que se extenderá desde hoy hasta dentro de seis meses, es decir, prácticamente toda la temporada de pesca. Aquellos pescadores que tuvieran alguno de estos cotos pueden ponerse en contacto con el Servicio Territorial de Medio Ambiente (987 296164), donde se les comunicará cómo se les devolverá el dinero o si pueden cambiar este coto por algún otro de la provincia en el que haya fechas libres.
El ‘moco de roca’ se convierte en una alga especialmente dañina puesto que, en ocasiones, puede llegar a cubrir todo el lecho del río, terminando con el alimento de los mosquitos y, posteriormente, toda la cadena alimentaria, llegando a desaparecer también las truchas.Además, la densidad que llega a alcanzar puede provocar que se atasquen acequias y todo tipo de construcciones dedicadas al paso de agua.
El motivo por el que se prohibe la pesca durante seis meses, lo que afectará previsiblemente a la celebración de la Semana Internacional de la Trucha que se venía celebrando desde hace años en aguas del Porma, es que, al ser una especie bastante desconocida, no se conocen métodos de control que hayan resultado eficaces hasta el momento, por lo que el trabajo se centra en evitar su propagación y esperar a que termine el ciclo vital del alga, que se considera de unos seis meses. Se trata del tercer caso que hay en España, el segundo en Castilla y León, de aparición del ‘moco de roca’, tras haber aparecido en Pirineos y en Soria.
Fuente: La Crónica de León.
En fín, una plaga más para nuestros ríos.
Un Saludo