Este report se lo dedico a Jefoce, que sé que tiene especial predilección por la Baja Navarra y a Ukerdi, el guardián de Larra.
El fin de semana pasado crucé la frontera con Francia y me monté una escapada a la Baja Navarra. Behe Nafarroa, su nombre en euskera, es la sexta merindad histórica de Navarra. Es un país pequeñito, pero absolutamente encantador. Con sus prados verdísimos bien cuidados, montañas blancas de fondo y unas colinas, a veces casi verticales, de helechos muy características.
Desde crío no había estado. Ya no me acordaba apenas de él, y redescubrirlo me dejó alucinado. Es un país precioso, sacado de un cuento de hadas. No tengo cámara y las fotos las tiré todas desde la carretera, pero el lugar merecía un reportaje, aunque las fotos no le hagan justicia.
También me pasé por la estación bearnesa o, como ellos mismos se presentan, vasco-bearnesa, de Arette.
Paso Ibañeta, bajo a Donibane Garazi / Saint Jean Pied de port y cuando llego al Lekunberri de la Baja Navarra, quiere salir el sol entre las montañas y prados y tiro un par de fotos desde el coche. De momento no quiero parar. A la vuelta sacaré más fotos :
Subo los pronunciadísimos col de Haitza y Burdinkurutxeta :
Llego a la cima y bajo hacia Xiberua, el país de Sola, con sus bosques y pastos de montaña nevados :
Ya en Xiberua se suceden los valles más abruptos que en Behe Nafarroa :
Inmediatamente de entrar en Bearne tomo el desvío hacia Arette / Areta. Y tras un imponente puerto se nos aparece la estación de esquí.
Habían dado unos 4 metros en la estación, a unos 1.650 mts. A pesar de que llegué varios días después de las nevadas porque el puerto de Belagoa permanecía cerrado, seguía habiendo muchísima nieve.
Me doy un paseo por los famosos chalets que están construidos como palafitos, con accesos en segundas alturas para cuando nieva mucho
En frente de los chalets el monte también aparece petado de nieve.
Dejo los chalets y me acerco hacia el puerto de Belagoa, andando porque permanece cerrado, y aunque la carretera está parcialmente limpia, han cortado el acceso. Hay enormes cantidades de nieve en lo alto del puerto.
Llego a la entrada a Navarra.
Entra una levísima neblina, que no me impide sacar la foto hacia el Anie. Postal de Larra dedicada a Ukerdi, que pocas veces habrá visto esta panorámica con más nieve.
Aunque los ventisqueros están unos pocos kilómetros más al sur, ha nevado tanto que en cualquier lado tienes cortes descomunales.
Poco después de la cumbre del puerto, han dejado de limpiar y solo se han aventurado un par de kilómetros con un vehículo oruga por encima de la carretera nevada. En algunos lugares los postes de puerto de montaña están tapados. En otros apenas sobresalen entre la nieve.
Me vuelvo hacia la estación, empieza a entrar una todavía tenue niebla. Me despido del Auñamendi.
A la salida de la estación están los mayores cortes de nieve.
Vuelvo hacia Ibañeta pasando otra vez por la Baja Navarra. Esta vez hago más fotos.
La Comunidad Autónoma vasca y la alta Navarra tienen verdes paisajes bucólicos, pero lo de la Baja Navarra es una auténtica barbaridad. Duele a los ojos. No es que tenga tres o cuatro lugares bonitos, es que TODO es un país de cuento, mires donde mires te encuentras con auténticas postales.
Paso valle tras valle y sigo sin ver gnomos y elfos. Pero estoy seguro de que están ahí.
No hay derecho. A la gente que vive aquí le tenían que poner un impuesto especial por vivir en un país así. No es justo que te asomes a la ventana o vayas a comprar el pan y te encuentres por todos los lados con todas estas vistas. No es justo.
Ibarrola. Va atardeciendo…y yo me quiero quedar a vivir aquí!!!
Dejo la Baja Navarra y ascendiendo Ibañeta me sorprende una puesta de sol entre los hayedos nevados con unos colores púrpura alucinantes. Pero como no tengo cámara y soy mucho malo con las fotos os tendréis que conformar con esto.
Ya en Roncesvalles, al atardecer…