La nubosidad sobre la vertical de Alcalá va tomando cuerpo pero es desesperante ver cómo se sigue viendo con total nitidez la línea del límite frontal hacia el N-NE sin moverse ni un ápice.
Además la salida 12Z del GFS desplaza la precipitación hacia el sur esta misma tarde, antes de lo previsto en la anterior salida.
Lo que hace 4 o 5 días se presentaba como una nevada intensa y persistente se va a quedar, como tantas veces, en nada.
Ahora, una vez más, a mirar al siguente evento. Tras un fin de semana gélido (ojito a esas mínimas en la noche del sábado al domingo) volveremos a estar atentos a la nieve en la madrugada del domingo al lunes, en la que se repite la confluencia de aire muy frío con borrasca atlántica y que si por fin se cumplen los modelos nos dejarán durante esas horas una buena nevadita, para a partir de media mañana dar paso a la lluvia. O sea, que el paisaje blanco, en caso de confirmarse la nevada, duraría poco.