Se acabó lo bueno y ya estamos de vuelta a la realidad del verano, máxima (ayer) de 35 ºC, ahora estamos en 27 ºC y le cuesta bajar bastante al termómetro, hay una ligera brisa que para estar en la calle es una maravilla, pero para los interiores y las casas no da más de sí para refrescarlas.
La nubosidad de evolución que estuvo más presente hacia el este al llegar la noche ha desaparecido, quedándose el cielo despejado.
En casa las estaciones me marcaban 30 ºC, ahora han bajado un poco, a unos 28 y pico grados con todas las ventanas abiertas.