Salgo a la calle (para volver a casa) a ver cómo se sienten esos 40º C, cual emocionado ante unas temperaturas negativas por estas tierras.
Lo único que me da grima y miedo es el riesgo de incendios, pero cómo experiencia histórica, sabiendo que mañana será otro día, no está mal tener algún día así.
Saludos.