Una vez más El Saja. La increíble reserva natural situada en el corazón de Cantabria. El colorido del invierno también tiene sus atractivos a pesar de la tristeza de ver a los árboles sin sus hojas y sin ése colorido verde intenso que cubren sus ramas.
Vamos hacia el Puerto de Palombera. En una revuelta del camino nos sale al paso la Cascada del Pozo del Amo por donde se descuelga un incipiente rio Saja que más tarde dará nombre a toda una reserva e incluso a un pueblo encajonado en el valle:
Arboles dormidos que esperan la bonanza de la primavera que ya se acerca:
Arquitectura de hielo:
La corza vigila el entorno desde el Balcón de La Cardosa:
Pasamos al valle de Campoo y hacemos la visita obligada al nacimiento del Ebro:
A poca distancia de su nacimiento el Ebro comienza su largo viaje hasta el mediterráneo:
A pesar del frio, la nieve y el hielo, algunas flores saludan al invierno que pronto acabará:
THE END.