Un poco de la historia del monasterio:
El ciprés esta plantado en 1882, ha ido creciendo, tupido y esbelto, hasta alcanzar más de 25m. de altura.
Monasterio de Silos tuvo principio en el curso del siglo VII. Por aquel entonces, y dadas las características geográficas del valle, los monjes simultanearon la vida monacal eremítica con la comunitaria, en forma de colonias monásticas pequeñas que llenaron todo el valle. Esta vida primera se prolongó desde el siglo VII hasta finales del primer cuarto del VIII, cuando los árabes conquistaron la Península Ibérica. A partir de aquí, no sabemos si los monjes optaron por retirarse a las montañas cántabroastures para luego regresar como comunidad mozárabe.
En el siglo X, la comunidad de monjes de Silos tiene una vida pujante y está bien organizada.
Conocemos los nombres de algunos de sus abades: Gaudencio (929-943), Diego (950), Placencio (954), Blas (978-979), Nuño de Doñasantos (1019), y tiene edificios monasteriales e iglesia. Posee propiedades bastante extensas que confirma el viernes 3 de junio de 954 el conde Fernán González.
Funciona ya su scriptorium, del que se conservan aún 3 ejemplares: "Las Conferencias de Casiano", copiadas por el monje Alburano en 928; el "Comentario a la Regla de San Benito" de Esmaragdo, escrito en 945 por el monje Juan y, sobre todo, el famoso manuscrito que contiene "Las Glosas Silenses", de hacia 970. A fines del siglo X y durante la primera mitad del siglo XI, la comunidad de Silos decaerá material y espiritualmente, debido a las razzias de Almanzor.
Por cierto gracias por la información de la secuoya , que preciosidad de árbol.