Me quedo de piedra, menudo ejemplar, jamás había visto un tejo con esas dimensiones, por las dimensiones de su tronco debe de ser milenario.
En Cantabria, como bién dice Campoó, el tejo crece y se reproduce de forma esporadica y natural en los bosques, hay buenos ejemplares, en aquellos lugares que en épocas fueron practicamente inaccesibles para el ser humano, el resto , la gran mayoria, estan mutilados o fueron objeto de algún tipo de aprovechamientos, con podas, para poder obtener su apreciada madera, al objeto de hacer pequeños utensilios.
Pero hoy albergamos la esperanza, tras su protección absoluta, de que superviviran y se podran reproducir, siempre y cuando el fuego y el pastoreo, los respeten.
Bonito reportaje, y un buen homenaje al árbol que sigue teniendo sagrado para los pueblos del Norte.
Saludos.