Pues al final nada más y nada menos que
10,7 mm. ha dejado esta primera tormenta seria de la temporada.
El seguimiento de imágenes de radar desde Zaragoza es muy interesante porque la tormenta en su nacimiento en Madrid y Guadalajara no para de aumentar su extensión y actividad a medida que se iba desplazando hacia el NE, pasando por a vertical de Arcos de Jalón cuando estaba sufriendo ese proceso de reactivación, convirtiéndose finalmente en una auténtica
línea de turbonada, posiblemente asimétrica, con la típica zona de lluvia estratiforme tras ella, justo antes de que nuevas células generadas hacia el S de esta estructura principal pasaran por Zaragoza y se adherieran a ésta.
Luego, me desvelé con la tormenta, y no he pegado ojo hasta altas horas... Casi me podía haber ido detrás de ella con la cámara
La próxima vez será.