En mayo suelen producirse las mayores concentraciones de partos-camadas de rayones al menos en la cordillera cantábrica y ello es motivo de alerta si por donde uno deambula, se cruza con una familia de navajeros encontrándote con una madre hembra joven, inexperta pero muy celosa y recelosa del bienestar de su camada. Me ha ocurrido ya 2 veces, la primera vez pude solucionarlo, pues en cuanto la jabalina me enfiló, me pude subir a un arbol. Ayer tuve que hacerle frente golpeando mi bastón en el suelo para amedrentar su afrenta.
En fín, cada dia son mas los jabalíes, son menos las personas por lugares poco concurridos y mas sitios asalvajados en los que campan a sus anchas. Nadie se enfrenta a ellos, no temen al hombre....
PD. Esto es extensible para el hermano oso. Cualquier dia ocurrirá una desgracia.