Vaya,
veo que el exibir rapaces amarradas a un hierro se ha convertido en una actividad turística más. Vi más o menos lo mismo en Penyíscola (CS), lo anunciaban en la puerta cómo rapaces en semilibertad, y por lo que vi yo, eso sí, desde un poco más arriba con el zoom de la cámara, la semilibertad debe ser por el medio metro de cuerda que los unía a la argolla, si hubieran tenido un metro, ¿le habrían llamado libertad?
Bonitas las rapaces, pero cuanto más sueltas mejor.
Saludos.