Bueno, digamos que la NAO es una más de múltiples correlaciones que podríamos usar para describir a grosso modo el "estado del arte" de la atmósfera en el hemisferio norte. Pero noe s el único. Rusia utiliza una combinación de tres vectores : Oeste, Este y Sur para hacer esta descripción. De hecho, cualquier correlación que contemple la diferencia entre los dos estados básicos, perturbado y no perturbado, sería útil.
Si el planeta ( la atmósfera ) se calienta o se enfria, el sistema climático responde tensionándose ó distendiéndose y por tanto, el frente polar se verá más o menos perturbado.
En una de las excelentes gráficas que se han puesto, puede observarse como la amplitud de la NAO crece desde mediados del siglo 19. De fluctuaciones pequeñas y rápidas estamos pasando a ámplias fluctuaciones y más lentas. ¿Tiene esto algún significado?. Es posible, pero se nos escapa incluso ante la mayor de las comprensiones del sistema climático : Los ciclos són ciclos hasta que terminan y empiezan las "anomalias".
Pero es que las anomalias dependen mucho de condiciones iniciales y de tramo de tiempo : ¿Qué són anomalias significativas?. Así pues puede que no estemos mirando hacia el sitio adecuado y solo veamos la función entre bambalinas.
La NAO es un aspecto bastante bello ( epistemológicamente hablando ) pero solo reafirma lo que ya sabemos : que la circulación es del Oeste sobre Europa o Meridional.
Al fin y al cabo, la NAO sería solo una resonáncia visible a nuestros sentidos de un estado fundamental del sistema climático o, diría más, del sistema geoatmosférico.
Así pues, la NAO por si sola no es demasiado útil, excepto como una bella descripción : Siempre hay que relacionarla ( o co-relacionarla ) con otros indicadores o estados.
Bién, ¿vamos hacia una NAO - ?. Pero, de momento, y como sucedio el año anterior, vuelve a aparecer de nuevo una NAO + en toda regla. ¿Se mantendrá hasta fines de Enero?, ¿Hasta Marzo?, o se retirará para dejar paso a un nuevo episodio de flujos meridionales?
Si hacemos caso a la tendéncia, después de un fuerte episodio de NAO- deberíamos ver uno de NAO + ( de hecho ya ha empezado ) y a no tardar mucho, de nuevo deberíamos volver a una NAO-. Pero esta predicción es intuitiva ( y seguramente demostrable estadísticamente ) y está sujeta a variaciones. Un ejemplo claro es que los modelos climáticos de hace tres años no podían preveer el rápido desgaste de la Corriente del Golfo en el Atlántico Norte. Esta previsión tenía en un tempo de 40 a 100 años. Esto, por supuesto, trastoca todas las previsiones que no modelicen el nuevo escenario y, por tanto, afectará a la NAO, que a su vez afectará, en un proceso de realimentación, a todo el sistema climático.
Es evidente que si en algo afectará la ralentización de la corriente es en un aumento de la energía potencial entre Artico y Ecuador y, por tanto, es lógico esperar súbitas y fuertes variaciones en el frente polar que descarguen esta energia. Esto traerá, posiblemente, fuertes episodios de NAO-, pero con espaciosos interludios de NAO+ donde volverá a acumularse la tensión.
¿ y más allá...?
Saludos