De momento, y ya van muchos momentos, seguimos como estábamos. La sequía galopante se resiste a marcharse. Los copos que durante una hora cayeron sobre Albacete, como en una maldición, ni cuajaban, ni mojaban el suelo. ¿Y del cacho de humedad que tenemos?. Vamos, para reirse. Olé ola. Si ya lo decía yo, y juro, que me hubiera gustado equivocarme.
Ah! y, aunque ésto sea sureste, levante, centro o yo que coño sé ya, antes como dice ReWeN, aquí nevaba y ahora ni llueve ni nieva. A joderse.
Saludos