No, no es lo mismo. Como sabemos un frente es la superficie de discontinuidad que separa dos masas de aire y propiedades distintas (discontinuidades frontales), pero este término puede verse "desde una doble perspectiva". Puede designar como ya se ha dicho, la discontinuidad reducida que sirve de lítime a dos masas de aire con características diferentes en el interior de una perturbació ondulatorio, o en un sentido mucho más amplio (algunos lo denominaban macrofrentes) se designa a las grandes discontinuidades, casi planetarias, que separan las diversas masas de aire fundamentales en la Tierra. A esto último se refiere el frente polar atlántico (también existe el frente mediterráneo, frente de los alisios, frente ártico, etc...).
Mientras tanto, simplicándolo también al máximo, el chorro polar se define como una corriente tabular, aplanada, horizontal, próxima a la tropopausa, de algunos miles de kilómetros de longitud, de varios cientos de kilómetros de anchura y varios kilómetros de espesor. Suele estar centrada sobre una línea de máxima velocidad de viento, siendo este al menos de 30 m/s en su eje central, superándose con frecuencia los 300 km/h.
Esto es porque, los vectores variación del viento con la altura y viento geostrófico, se sumarán si los gradientes de presión y temperatura tienen el mismo sentido, y se restan si poseen sentido contrario. Y sólo en las zonas templadas tienen igual sentido. Así, en nuestras latitudes templadas coinciden los sentidos de los gradientes de presión y temperatura; por lo tanto, el vector viento y su variación con al altura son del mismo sentido, aumentando el viento geostrófico con la altura; por lo tanto, el viento conserva su dirección y sentido según ascendemos, pero va en aumento, ya que el vector variación del viento con la altura actúa en su mismo sentido. Por lo tanto, los vientos del oeste, siguen del oeste en toda la troposfera. El límite superior es la tropopausa, pues posteriormente, al entrar en la estratosfera se invierte el gradiente de temperatura, y el viento va amainando según ascendemos, hasta el punto que se llega a una zona de calmas, para después girar al este.