Si no lo digo reviento: lo del miércoles-madrugada del jueves en Burgos es de lo más fuerte que recuerdo en años. Por primera vez en mi vida he tenido que usar cadenas, obligatorias para salir de la capital.
Ahora (3 de la mañana) tenemos menos de -6º C, sopla un viento del carajo, y ahi una ventisca a rachas que da miedo. Mis ventanas aullan como una docena de lobos con megáfono. La ventana de mi habitación está salpicada de motas blancas: copos helados..¡que no se derriten! Y se acumulan en el suelo unos 15-20 cm. de nieve, aunque me resulta casi imposible decirlo con certeza, porque la nieve se acumula caprichosamente, llevada por el viento. Al estar todo helado, se cubren de blanco hasta las paredes. Las carreteras son blancas pistas de patinaje con montículos diseminados aquí y allá. Es como la arena de playa en un día ventoso. Sencillamente espectacular.
En resumen: vale, no es la nevada del siglo, no estamos batiendo records negativos, pero es una pedazo ola de frío.
Desde luego, en todos los noventa no ha habido algo así, y las del 85 y el 2001 fueron mucho más secas por aquí. Para un aficionado a la meteorología, UNA PRECIOSIDAD.