La zona del norte de Burgos es quizá una de las más bonitas de ésta provincia y de las que más se parecen al paisaje cántabro. No obstante hay que recordar que la elevada pluviosidad de la zona y ser uno de los lugares con mayor iinivación, confieren al paisaje ése torno verde característico de las tierras situadas al norte de la cordillera cantábrica que hace también de divisoria administrativa.

Comenzamos el viaje desde Santander, pasando antes por la villa de Ramales de la Victoria (escenario de las guerras carlistas) y siempre vigilada por la mole puntiaguda del Pico San Vicente que asoma por encima de los tejados:


La carretera asciende un poco para superar los contrafuertes que caen de la Peña La Mortera, siguiendo la misma dirección de la famosa cueva de Covalanas. Desde un alto, el claro del bosque nos ofrece una bonita imagen de Ramales:


La carretera entra unos pocos kilómetros en Vizcaya pasando por Lanestosa, pero enseguida volvemos a Cantabria y nos enfrentamos con la subida al Puerto de los Tornos (el de menor altura de los que cruzan la Cordillera) desde el que tenemos ésta bonita vista de gran parte de Cantabria; hacia el horizonte la vista nos la limita el mar Cantábrico:


El alto del puerto es una zona despejada de árboles. Desde aquí se puede subir cómodamente al Pico Zalama (situado a la izquierda de la foto) y recorrer todas las cimas que jalonan la pequeña cordillera de los Montes de Ordunte:


Vamos pasando pueblos recogidos en los valles hasta llegar a la capital de la comarca: Medina de Pomar. Aún quedan varias decenas de kilómetros para llegar a uno de los lugares con más encanto de ésta zona norteña de Burgos: La ciudad de Frías, asentada en una loma del terreno:


Para llegar a Frías es necesario cruzar el rio Ebro. Ahora hay un puente nuevo pero antiguamente se cruzaba por éste otro medieval. En el centro, la torre albergaba en épocas antiguas los departamentos en donde se pagaba los tributos por las mercancias:


El Ebro aquí se remansa dando lugar a unos bonitos reflejos del puente en sus aguas:


(continúa)

Las orillas del Ebro son un lugar estupendo para pasear bajo los chopos y alisos, teniendo como telón de fondo el sólido puente medieval:


La carretera sube hasta la misma ciudad de Frías desde donde se puede contemplar el esbelto castillo edificado en una loma de toba:


Y desde éste mismo punto podemos admirar toda la extensión del Valle de Tobalina:


Y los montes Obarenes...en la distancia:


Entramos al interior del castillo paseando por sus rincones y por el patio de armas:



Desde la almenas vemos en la distancia la mole del Humión:


Y las apretadas callejuelas de Frías:



(continúa)

muy chulo...para mi esta zona es muy desconocida, una pena pero no tener ni coche ni carnet te penaliza, todo tiene sus pros y sus contras...
gracias por mostrarnoslo..por lo menso nos ahcemos una idea

La Torre del Homenaje...imponente:


Por las calles de Frías:



Considerable altura si miramos para arriba a la Torre del Homenaje del castillo:


La parte sur de Frías es bastante parecida a las míticas casas colgadas de Cuenca:


Nos despedimos de Frías. Nuestra próxima meta es Espinosa de los Monteros. Como su nombre indica, de aquí salieron los monteros que acompañaban a los nobles en sus jornadas de caza, pero también magníficos canteros. Aquí estamos en la plaza mayor:


De Espinosa de los Monteros ponemos rumno de nuevo a Cantabria. La ruta elegida pasa por el valle de Las Machorras y asciende hacia el Portillo de Lunada:



Dejamos atrás algunas cumbres de la Cordillera que emergen en ésta zona eminentemente caliza, llena de cuevas, simas y enormes galerías subterráneas. La Peña Lusa y el Alto de Imunía vigilan la ascensión al Portillo de Lunada:


A la orilla de la carretera la vegetación es casi agobiante.


Magníficos bosques de encinas y cabañas construídas en las lomas de la montaña:



Y llegamos al alto. Estamos en el Portillo de Lunada. En la otra vertiente, Cantabria:



(continúa)

Desde Lunada, nuevamente la sierra caliza de la que sobresalen Peña Lusa y el Alto de Imunía.


La vertiente cántabra del Portillo de Lunada es mucho más pendiente. A unos dos kilómetros desde el puerto, está el Mirador de Covalruyo desde donde se observa el serpenteante discurrir de la carretera y las estribaciones del Castro Valnera, la ultima montaña de la Cordillera que por esta zona oriental de la misma ssupera los 100o metros (exactamente su altura es de 1717 m)


La cabecera del rio Miera, que nace aquí mediante la unión de muchos arroyos, fué en su tiempo un enorme circo glaciar. Aún se pueden ver las morrenas y la forma en "U" de éste característoco valle, jalonado en sus extremos por cumbres imponentes, como la del Picón de los Lastreros:


La carretera desciende por San Roque de Riomiera hasta los valles inferiores. Cerca de Liérganes la mole caliza del Pico Levante se asoma a la orilla del camino:


Siempre me han gustado las carreteras con árboles a los lados. Forman una estupenda sombra y un bonito techo vegetal:


Llegamos por fin a Lérganes donde no puede faltar la visita al puente romano. A lo lejos, las cimas de Miramón y Cotillamón, las famosas "Tetas de Liérganes":


Junto al rio Miera se haya el monumento a Francisco de la Vega y Casar, el famoso Hombre-Pez de Liérganes. Su leyenda hizo que éste bello pueblo cántabro fuese conocido en medio mundo.


Finalizamos el recorrido ante la casa más fotografiada de Liérganes 8y éso que en ésta ocasión no había tantos geranios como otras veces)


Bien...pues nada más. espero que os haya gustado el reportaje.

Bonita ruta, FRENTEFRIO. Las Merindades, Lunada y otras zonas del norte de Burgos son preciosas. Una pena que sólo haya estado de pasada por ahí, porque sin duda son sitios para ver y degustar con tiempo.

Saludos.

Sí. Es una zona muy bonita y con buenos paisajes. Merece la pena acercarse por ahí de vez en cuando.

Muy buen reportaje, lo he disfrutado.

Aunque no me pilla demasiado lejos, la verdad que es una zona que apenas conozco. Sin duda, este reportaje es un motivo más para visitar esos parajes con calma.

Saludos.

Excelente reportaje. 

Muy chulo FRENTE FRIO. Viendo las fotos de Frías me he transportado a mi niñez. Iba en los veranos a Miraveche en la ladera sur de los Montes Obarenes y de vez en cuando, cuando hacía calor nos llevaban a bañarnos a Frías, justo en el remanso del puente que has fotografiado. Que nostalgia.

Muy chulas las fotos frentefrío.

Si me permites una corrección la sierra que se ve al fondo de la foto no son los montes obarenes sino la sierra de la tesla en las proximidades de Medina de Pomar, esa foto está sacada mirando hacia el NW aproximadamente y los obarenes quedan hacia el lado contrario. Saludos

Y los montes Obarenes...en la distancia: