no obstante en terrenos lo suficientemente amplios y con buena experiencia de observación si pueden distinguirse estructuras de este tipo a simple vista.
Por poderse se puede, pero no puedes estar seguro hasta que lo has visto luego en radar. La línea de turbonada que pasó por Cáceres-Badajoz-Ávila-Toledo-C. Real se extendía mucho más allá de lo que yo podía ver. Desde luego se veía que no era algo normal, pero yo desde el suelo no podría aventurarme a decir qué era, sino en el mejor de los casos, formular hipótesis. El satélite en este caso la información que produjo fue un gran sistema tormentos, un SCM, pero no informaba de su estructura interna (si era línea de turbonada, línea de supercélulas, multicélula, derecho...):
En la imagen con colores de topes se ve que es algo potencialmente severo, pero tampoco da pistas sobre su organización exacta:
Y esto una animación, donde, a última hora se podían ver los overshooting tops de las varias células en desarrollo que había en ese momento, además de ondas (¿gravitacionales?) en la capa nubosa que da muestra de su potencia.
Y ya al día siguiente pude obtener la imagen satélite con una resolución de 250 metros, donde se podían ver mucho mejor las céulas individuales que formaban el sistema en el instante de la foto, aunque difícil, por no decir imposible de saber si forman parte de un sistema más grande y de su estructura y naturalmente sin animación disponible. Todo esto demasiado tarde además, claro (24 horas).
Por todo esto, las imágenes radar son imprescindibles, mucho más fiables que las imágenes satélitales, aunque no por ello exentos de posibles errores.
Mi opinión es que lo mejor para la caza es combinar las observaciones propias con las que nos proporciona la tecnología. Yo desde luego no me voy a hacer cientos de kilómetros sin saber si la convección ya se ha organizado y voy a llegar tarde, por ejemplo. O ir a lo que desde la distancia promete pero cuando llego es una multicélula normalita, que si son unas decenas de kilómetros, genial, pero lo dicho, cien o así, como que no. Otra cosa que yo hago es irme a donde creo que puede haber movimiento a ciegas, y luego, conforme me voy acercando, mirar radar para ver si se ha iniciado la conveccción por las cercanías, trayectorias, etc. Hay que aprovechar todas las herramientas que uno tiene a mano si no se quiere hacer kilómetros en balde o perderse algo bueno por dejarse guiar sólo por las observaciones visuales. Y esto es mi opinión, que creo que es razonable, otra cosa es que yo esté obligando a nadie a hacerlo así, pero con cabezonería u orgullo, Miliokos, no se puede, máxime cuando tú mismo recalcas "Creo que en la comunicación uno siempre aprende", algo completamente cierto.
Y acerca de la madre de todos los sistemas tormentosos, los derechos, yo también estoy mirando mucho por internet últimamente, pero casi todo está en inglés, con el esfuerzo extra que supone para los que no dominanos bien el idioma de Shakespeare, pero alguna cosa tengo por ahí en favoritos. En otro momento busco y cuelgo alguna cosa, pero decir que es parecido a una línea de turbonada pero a lo bestia. En España sólo se ha reconocido uno, el del 17 de agosto de 2003 en Cataluña. Decir que duró 12 horas, en Manresa dio una ráfaga de 181 km/h y la longitud de las zonas en donde se produjeron vientos de 94 km/h o más es de 900 km de largo y de 100 de ancho, con 12 observaciones de vientos de 118 km/h o más. Pueden generar también tornados, pero para que a un sistema tormentoso se le pueda calificar de derecho se tienen que dar estas condiciones:
1. Ha de haber un área con observaciones de
vientos inducidos convectivamente y/o
rachas convectivas ³ 26 m/s (50 kt = 94
km/h). El área debe tener un eje mayor con
una longitud de, al menos, 400 km.
2. Las observaciones deben de tener un patrón
de ocurrencia no aleatorio. Por tanto, debe
existir un patrón de progresión cronológica,
como una senda individual (derecho
progresivo) o como una serie de sendas
(derecho serie).
3. Dentro del área debe haber, al menos, tres
observaciones, separadas por 64 km o más,
de daños F1 o superior en la escala Fujita
(Fujita, 1971) y/o rachas convectivas de 33
m/s (65 kt = 119 km/h) o mayores.
4. No deben transcurrir más de 3 h entre
episodios sucesivos de daños por viento.
5. El sistema asociado, indicado por los
campos de presión y viento en superficie,
debe tener una continuidad espacial y
temporal. Sin embargo, el movimiento de
los ecos radar del sistema no debe ser
continuo.
6. Las múltiples sendas de daños por viento
deben formar parte del mismo SCM.
Vamos, que son una rareza incluso en los mismos EEUU, donde no todos los años los hay.
Y nada más que añadir