Los científicos de la NASA que realizaron estudios del suelo de Marte, apoyados en las muestras de rocas y minerales tomadas por el robot Opportunity, ratificaron hoy que en un pasado remoto existieron las condiciones necesarias para que se desarrollara la vida en el planeta rojo.
Fuente: LA FLECHA, AGENCIAS
Steven Squyres, de la Universidad de Cornell, en Nueva York, y líder científico de las misiones de Opportunity y Spirit, aseguró que "el registro geológico de la llanura investigada indica que las condiciones allí existentes en el pasado fueron propicias para el desarrollo de la vida".
Once estudios apoyados en análisis del robot Opportunity sobre "Meridiani Planum, la llanura de Marte que recorre desde enero, aportan datos para que los científicos afirmen sin dudas que esa planicie estuvo inundada por corrientes de agua poco profunda.
"El agua se evaporó tiempo después, pero el mismo lugar registró una segunda inundación tras el impacto de un objeto que creó un cráter del tamaño de una cancha de fútbol", señala un informe publicado por la revista Science.
Según los investigadores, los afloramientos geológicos estudiados por el robot indican que las rocas sedimentarias de Meridiani Planum se formaron en presencia de agua a lo largo de 250.000 años.
Lo que aún no está confirmado por los científicos es que el planeta rojo haya sido húmedo y más cálido en el pasado. Como su gemelo Spirit, el robot Opportunity no halló pistas de actividad biológica en Marte, pero tampoco estaban preparados para ese objetivo ambos robots.
El objetivo era encontrar evidencias geológicas de condiciones medioambientales que hubieran sido óptimas para la vida. Opportunity las encontró en las rocas del pequeño cráter Eagle, donde se posó al concluir su descenso sobre Meridiani Planum.
En los once estudios, publicados ahora por Science se describe con detalle cómo las imágenes, perforaciones y raspaduras realizadas por el robot muestran que las rocas sedimentarias de ese lugar están compuestas por óxido de hierro y sulfatos hidratados de magnesio, calcio y hierro.
Esas piedras se sedimentaron en capas, que fueron alteradas por la acción de aguas muy ácidas, probablemente las de un mar salado y poco profundo.