¿Habéis oído hablar de la riada de 1949?
La delegación de AEMET en la Comunidad Valenciana ha publicado un hilo en twitter, lo transcribo aquí.
La gran olvidada, la riada del Turia del 28 de septiembre de 1949.
La gran olvidada, la riada del Turia del 28 de septiembre de 1949, en plena posguerra, fue la primera gran riada catastrófica del siglo XX sobre la ciudad de València, y de la que hoy se cumplen 70 años. Es conocida como “la riada de las chabolas”.
Los testimonios de la época son impactantes. Hacia las 5 y media de la tarde, los obreros del molino de Manises “vieron acercarse a enorme velocidad una ola gigantesca de más de tres metros de altura”
“A las seis menos cuarto el cauce del Turia presentaba su aspecto normal. A las seis llegaron las primeras llamadas de socorro porque una gigantesca riada bajaba de los pueblos limítrofes en gran avalancha”
En plena posguerra el cauce del Turia estaba lleno de chabolas. Dentro del cauce del río podría haber más de 2.000, la mayoría situadas entre los distritos del Botànic, Exposició y Marítim.
En la reunión que se celebró en el ayuntamiento el 3 de octubre de 1949 para tomar medidas que paliaran los efectos de la riada del 28 de septiembre, se dijo que deberían de haber “de ocho a diez mil habitantes, en su casi totalidad procedentes de otras regiones”
Durante la mañana y la tarde cayeron breves chubascos que hasta las 18 horas acumularon 16.5 l/m2 en València. Pero en la zona de cabecera de la rambla de la Escarihuela, afluente del Turia, esa misma tarde debió de producirse una tormenta de intensidad torrencial.
Los valores de precipitación más altos de los que se disponen se registraron en el Camp de Turia y localidades al sur de la Calderona: Llíria, 165.0 l/m2; Benaguasil, 133.0 l/m2; Gilet, 110.0 l/m2 y Serra, 100.0 l/m2.
Pero algo más al norte, en la zona de montaña al norte de Llíria y Bétera, la cantidad de precipitación debió de ser notablemente superior, lo que justificaría la violenta riada que llegaría horas después a la zona baja del río.
En medio de la “arrolladora y rápida crecida” (Levante, 29 de septiembre de 1949, pág. 1), la tormenta arreció sobre València, recogiéndose entre las 18:54 y las 19:10, 24.0 l/m2, pero la parte más intensa de la tormenta que llegó a la costa no descargó sobre la capital, sino algo más al norte, en localidades del litoral de la comarca de l’Horta Nord, en Rafelbunyol, Massamagrell y Museros se registraron más de 100.0 l/m2, y muy cerca de la capital, en Almàssera, se acumularon hasta 160.4 l/m2.
Oficialmente hubo 41 víctimas mortales, 22 pueblos del nordeste de la provincia gravemente afectados por la riada, más de 2.000 chabolas arrasadas por el ímpetu de las aguas, 98 casas totalmente destruidas y 624 que precisaron de urgente reparación.
Ese mismo día hubo otro núcleo de precipitaciones torrenciales independiente del de València en las proximidades de la ciudad de Castelló, donde se produjeron 10 víctimas mortales; en el observatorio provincial del Institut Ribalta se registraron 139.0 l/m2, tras la riada las autoridades reaccionaron de forma contundente. La prensa del 4 de octubre publicaba: “ha sido resuelto por los organismos competentes que en lo sucesivo no se permita la construcción de viviendas ni el cultivo de parcelas dentro del cauce del río”
Ocho años después, en 1957, una doble avenida del Turia golpeó nuevamente València. Esa historia es más conocida por todos. Muchas placas distribuidas por toda la ciudad recuerdan el trágico acontecimiento. No nos consta que haya ninguna recordando la riada de 1949.
https://twitter.com/AEMET_CValencia/status/1177858100214284288