Aquí tenemos una vista de la estación superior, en la cima del pico, tomada desde la propia cabina. Por debajo, un vacío de cientos de metros:
A la llegada, la vista como es lógico queda magnetizada en primer lugar por la visión de los gigantes blancos: un colosal paredón que cierra completamente el valle de Chamonix por el sur. De izquierda a derecha, la
Aiguille du Midi (3842m) (donde se distingue claramente la estación superior de su teleférico, la de mayor altitud del mundo), el
Mont Blanc du Tacul (4248m) (recién vencido por Meteocoll y Wind), el
Mont Maudit (4465m), el
Mont Blanc (4809m), el
Dome du Gouter (4304m), la
Aiguille du Gouter (3863m) y la
Aiguille de Bionnassay (4051m).
Los mismos picos (sin la Aiguille du Midi), y abajo de todo, más de tres mil metros por debajo de ellos, Chamonix en el fondo del valle. A media altura, los glaciares de Bossons (izquierda) y Taconnaz (derecha). A mediados del siglo XIX, el de Bossons llegaba prácticamente hasta el propio Chamonix; en la actualidad ha retrocedido bastante pero aún así es uno de los que alcanza menor altitud en Europa, exceptuando los de Islandia y Escandinavia.
Zoom sobre la cúpula del Mont Blanc: