Trabajos de tratamiento contra los hongos aplicado en los plátanos del Campo Grande el año pasado y cuyos resultados no fueron todo lo positivos que se esperaba. La plaga que defolia los plátanos de sombra se extiende y obligará a una poda radical de los árbolesEs pequeño, pero le apodan
'tigre de los plátanos' y su ataque, peligroso como el de su homónimo de cuerpo rayado, preludia la muerte de uno de los árboles más extendido y de mayor uso para conseguir zonas de sombra en los meses de más calor, el plátano de sombra. Un diminuto insecto chupador, la 'Corytucha ciliata', se ha convertido en una de las preocupaciones más serias del Servicio Municipal de Parques y Jardines. Su presencia, detectada por primera vez en Valladolid en el año 2002, se extiende desde el año pasado a toda la ciudad. Ha infectado la mayor parte de los árboles y se observa un incremento progresivo de la población. Los ejemplares afectados pierden las hojas y la solución prevista, después de otros intentos con pírricas victorias,
exigirá una poda radical, más intensa que la que se aplica con carácter anual a estos casi 30.000 ocupantes de parques, aceras y avenidas de la capital.
La picadura del insecto en las hojas transmite a la planta un hongo, 'Apiognomia veneta', cuya afección provoca la pérdida de las hojas del especimen infectado. «Las hojas se desprenden con un aspecto como si estuvieran heladas y los árboles terminan defoliados».
El tratamiento, reconocen los técnicos, provocará reacciones de sorpresa en algunos ciudadanos porque la única respuesta que funciona pasa por una poda «por debajo de la madera de dos años», una reducción radical del tamaño del árbol que resultará muy visible en los árboles de gran porte. «Pero es la única respuesta con la que contamos»
El zarpazo del 'tigre de los plátanos' asusta por sus posibles consecuencias. «En Barcelona han tenido que arrancar 15.000 árboles y sustituirlos por otras especies», avisa Ángel Asensio quien considera que la sanidad vegetal estuvo marcada el año pasado por un considerable aumento de todo tipo de afecciones, tanto bióticas como abióticas.
Nuevos peligrosEl responsable de Parques y Jardines indica que las condiciones atmosféricas han ocasionado un incremento de las enfermedades originadas por la presencia de hongos, como resultado de una secuencia de situacines meteorológicas favorables al desarrollo de estas especies vegetales. El
'Seridium cardinale' es otro de esos minúsculos asesinos con orden de busca, captura y destrucción por los jardines vallisoletanos. Hasta el momento, este hongo ha acabado con más de un centenar de cipreses y ha dejado seriamente afectados otros muchos. Pero además, los almendros de Parquesol han desaparecido de manera paulatina tras el ataque combinado de varios hongos conocido con el nombre genérico de 'podredumbre seca del almendro'. El 2003 se detectó la presencia de otra especie más de estos peligrosos vecinos, 'Marssonina brunnea' que ocasiona la caída prematura de las hojas en varias especies arbóreas.
Saludos