Valle de Olid, yo no recuerdo personalmente esa borrasca del 89, pero sí tengo grabada en la memoria la brutalidad del episodio de Lothar, que yo viví en Metz (NE de Francia) en diciembre de 1999 (el 27 o 28, me parece). Las rachas de viento más fuertes (130-140 km/hora) me pillaron durmiendo de madrugada (bueno, dormir lo que es dormir, dormí poco, claro), y la verdad es que fue algo impresionante que en esos momentos no me hizo ninguna gracia, nunca había vivido hasta entonces nada parecido. Aun en zona urbana y con la protección de los edificios, no se oía nada más que el bramido del viento y los objetos que caían por todas partes (ramas, tejas, cubos de basura ...). Hubo un par de horas francamente aterradoras, incluso para un fan de la meteo como yo.
A la mañana siguiente, ya amainando el temporal, pudimos ver destrozos por todos lados (sobre todo árboles caídos sobre coches), vallas publicitarios, trozos de tejados, pero sobre todo centenares de árboles (algunos de ellos centenarios bastante grandes) partidos de cuajo .... Sí, es verdad que cuando el Atlántico Norte hace de las suyas, es para echarse a temblar ...